El mercado financiero afloja con su apuesta a un nuevo salto en el precio del dólar. La estabilización del nivel de reservas del Banco Central, las abultadas ventas de moneda extranjera para atesoramiento minorista y el incremento en las tasas por depósitos permitieron desarticular presiones sobre el tipo de cambio. La reducción de las tensiones se logró en una coyuntura internacional con una marcada reducción del excedente de divisas generadas por el frente comercial y en un escenario financiero en permanente tensión por la disputa con los fondos buitre. La sostenida caída en el valor esperado del dólar ofrece un termómetro para las expectativas devaluatorias. El BCRA informó ayer que, a través de su intervención, el valor esperado del dólar registró una retracción diaria de 1,8 punto porcentual en el caso de los contratos de cobertura cambiaria de corto plazo al 30 de abril y una retracción de 1,3 por ciento para los instrumentos que vencen en marzo de 2016.

“Con las nuevas tasas implícitas en los mercados de futuros y el nivel de tasas de interés en pesos vigentes se profundiza el incentivo a concretar inversiones en moneda nacional, las que en los últimos meses han demostrado una rentabilidad sensiblemente superior a las realizadas en moneda extranjera”, expresó ayer el BCRA a través de un comunicado. El organismo que conduce Alejandro Vanoli enfatizó que su “estrategia” está “orientada a garantizar el crecimiento, preservando la estabilidad financiera, al tiempo que se enmarca en una serie de medidas adoptadas en los últimos seis meses por la entidad que contribuyeron a desalentar expectativas de devaluación y a asegurar previsibilidad en materia cambiaria”.

Durante marzo la autoridad monetaria obtuvo una ganancia record de 1249 millones de pesos por sus operaciones en futuros de dólar. En los últimos seis meses acumuló ganancias en esta operatoria por 4967 millones de pesos. Los “futuros” ofrecen mercado para hacer apuestas en pesos sobre el precio del dólar en los meses venideros: los compradores de contratos proyectan un alza y quienes los venden pronostican un precio inferior. Cuando el precio es mayor al pactado en el instrumento el vendedor debe integrar la diferencia en pesos y viceversa.

El tipo de cambio oficial comenzó la semana sin modificaciones, a 8,84 pesos, mientras que la cotización del dólar en cuevas y arbolitos del microcentro porteño retrocedió 6 centavos hasta 12,45 pesos. El precio blue representa una caída de 1,35 pesos frente al valor de 13,80 pesos exhibido a principios de año. Uno de los factores más relevantes para explicar el comportamiento del mercado ilegal es la posibilidad de acceso a la cotización oficial más la percepción del 20 por ciento a cuenta del Impuesto a las Ganancias en el sistema bancario. A lo largo del primer trimestre del año se canalizaron por esa vía 1402 millones de dólares. En marzo se entregaron 485,3 millones, la marca mensual más elevada y, en lo que va de abril, ya se efectivizaron transacciones por 115 millones de dólares. A partir de este mes las entidades más activas en la venta de divisas como el Banco Santander comenzaron a canalizar las operaciones a través de Internet.

La venta de moneda extranjera para ahorro representa un esfuerzo significativo para las reservas del Banco Central. Aunque costoso en materia de divisas, se trata de un instrumento que permitió restar presiones sobre el mercado cambiario y desarticular expectativas devaluatorias.

Por su parte, el precio del dólar en las operaciones con bonos y acciones registró ayer incrementos. El denominado contado con liquidación trepó 14 centavos, hasta 12,13 pesos, y el dólar Bolsa subió 5 centavos, para cerrar a 12,14 pesos. En tanto, las principales acciones que cotizan en la Bolsa de Comercio porteña subieron 3,3 por ciento luego del fin de semana largo.