ECONOMíA › ARGENTINA Y CHINA RUBRICARON LOS CONTRATOS TéCNICOS Y COMERCIALES PARA ATUCHA III
El objetivo es empezar a construir la nueva planta atómica el año próximo. También se selló el acuerdo marco para la realización de una quinta central. El financiamiento para ambas obras es de 15 mil millones de dólares.
Los gobiernos de Argentina y China oficializaron ayer en la ciudad turca de Antalya, donde se está llevando adelante la cumbre del G-20, la firma de los contratos técnicos y comerciales para la construcción de la cuarta central nuclear y el acuerdo marco para la realización de la quinta central nuclear. El evento fue encabezado por los ministros de Economía, Axel Kicillof; de Planificación, Julio de Vido, el Canciller Héctor Timerman, y el presidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China, Xu Shaoshi. A su vez, el presidente de la estatal Nucleoeléctrica, José Luis Antunez, y su par de China Nacional Nuclear Corporation (CNNC) fueron los encargados de rubricar los convenios. “Los acuerdos que acabamos de firmar tienen una importancia histórica. Entre ambos estamos hablando de financiamiento para obras por una cifra cercana a los 15.000 millones de dólares”, aseguró Kicillof.
El 18 de julio del año pasado, el ministro de Planificación, Julio de Vido, dio el puntapié inicial al firmar con el director de la Administración Nacional de Energía de China, Xu Xinxiong, un convenio de cooperación para la construcción de la cuarta central nuclear que estará a cargo de Nucleoeléctrica. A partir de entonces se comenzaron a negociar los detalles que ayer se terminaron de oficializar. De Vido destacó ayer que los contratos constituyen un hito histórico debido a que se trata del “crédito más grande, con la tasa más baja y el plazo más largo de la historia argentina”. Además resaltó que la firma de estos contratos “es un paso fundamental para diversificar la matriz energética, aumentando la participación del sector nuclear, cuyo desarrollo de estos años en el marco de un plan estratégico para la próxima década ya es una política de Estado”. Los términos de referencia del financiamiento se firmaron el sábado en Beijing con el ICBC. El gobierno informó que el crédito contempla un plazo de 18 años por un 85 por ciento del total del proyecto, a un costo financiero total menor al 6,5 por ciento anual.
Atucha III será un reactor de uranio natural y agua pesada con una potencia de 760 megavatios (MW). No se construirá otro reactor como los de Atucha I y II porque es un diseño desarrollado por la alemana Siemens, empresa que se retiró de la actividad nuclear, lo que obligó al gobierno argentino a hacerse cargo de la terminación de la segunda central a través de la firma Nucleoeléctrica. Descartado Siemens, el único desarrollador de reactores de uranio natural con agua pesada es Canadá, propietario de la tecnología Candú (Canadian Deuterium Uranium), de probada experiencia a nivel mundial. La Argentina ya tiene antecedentes en el uso de la tecnología Candú de cuando construyó Embalse. Por lo tanto, lo único que requiere de los canadienses son las actualizaciones y la documentación de una central de referencia.
El valor previsto para la cuarta central nuclear es de 5.994 millones, y tendrá un 62 por ciento de componentes de origen argentino y 38 por ciento de origen chino. Por ejemplo, la planta de agua pesada está ubicada en Neuquén y, si bien importa el uranio, Argentina controla el proceso de fabricación de los elementos combustibles. Además, varios componentes de la central podrían fabricarse localmente. En lo que respecta a la isla del reactor, la firma Combustibles Nucleares Argentinos (Conuar), propiedad de la CNEA y del Grupo Perez Companc, puede fabricar los tubos de presión y los tubos de recipiente del moderador, mientras que otras firmas nacionales están en condiciones de proveer generadores de vapor e intercambiadores. Lo que habría que importar en este caso sería el recipiente de Calandria y las bombas del primario. En el Balance de Planta, las instalaciones complementarias no nucleares de la central, firmas nacionales pueden aportar tubos de refrigeración, condensadores e intercambiadores. Lo que no se fabrica en el país es la turbina de vapor, que inevitablemente habría que importar, y el generador eléctrico principal. El gobierno estima además que Atucha III generará siete mil empleos directos durante la construcción. La ventaja para los chinos es que ellos podrían venderle a la Argentina la turbina de vapor, el generador y otras piezas que sí será necesario importar.
La central se montará en el Complejo Nuclear Atucha, ubicado en Zárate, donde ya funcionan Atucha I y II. La adjudicación de los terrenos se oficializó el 27 de octubre mediante un decreto del Poder Ejecutivo.
Adicionalmente se acordó la versión final del Contrato Marco entre Nucleoeléctrica y CNNC por la quinta central nuclear, que establece los lineamientos generales sobre los que se desarrollarán a futuro los contratos comerciales y financieros para la construcción de esa central. En este caso, se montará un reactor de tecnología china de agua liviana y uranio enriquecido de 1000 megavatios. Este proyecto contará también con participación de la industria nacional, aunque en menor porcentaje.
Tanto la cuarta como la quinta central nuclear se inscriben en un acuerdo estratégico con China que incluye otra serie de iniciativas de largo plazo. La construcción de las represas hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic y la recuperación del Ferrocarril Belgrano Cargas fueron los primeros proyectos en ponerse en marcha, con desembolsos que ya comenzaron a efectivizarse. “La concreción de emprendimientos de infraestructura, logística y energéticos son fundamentales para continuar incrementando la competitividad y el desarrollo productivo del país”, destacó el gobierno.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux