Mauricio Macri designó al economista de la city Jorge Todesca como titular del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en reemplazo de Norberto Itzcovich, quien asumió al frente de la entidad en octubre de 2014. El economista mantuvo una reunión ayer por la mañana con Alfonso Prat-Gay, futuro ministro de Hacienda y Finanzas, para comenzar a delinear tareas que se llevarán adelante en la institución. La recomposición de las relaciones con el FMI y la vuelta a las auditorias del organismo de crédito a través del artículo IV serían algunas de las prioridades de Cambiemos en materia de estadísticas. Todesca fue viceministro de Economía de Eduardo Duhalde. Luego de esa experiencia fallida se refugió en su consultora, desde donde protagonizó una dura pelea con Guillermo Moreno. El ex secretario de Comercio lo acusó de difundir indicadores de inflación falsos con el propósito de generar ruido en la economía para obtener beneficios personales. El juez Claudio Bonadio terminó procesando al ex secretario por “abuso de autoridad”. Desde la consultora de Todesca, si bien continuaron publicando sus índices de inflación lo hicieron bajo el formato del Indice Congreso, que presentaba todos los meses Patricia Bullrich.

El Indec quedó en el ojo del huracán desde 2007, cuando el Gobierno desplazó a sus autoridades con la acusación de que se filtraban datos a consultoras y medios de comunicación. La pérdida de credibilidad en las estadísticas oficiales fue acompañada por reproches del FMI, que exigió elaborar un nuevo índice de inflación.

La respuesta del kirchnerismo fue avanzar en distintas medidas para recuperar la credibilidad. En un principio se solicitó un documento técnico a las universidades públicas acerca del estado de las estadísticas. Luego se trabajó en conjunto con centros de estadísticas del mundo e incluso con el propio Fondo Monetario Internacional para reelaborar el índice de precios al consumidor, que a partir de 2014 dejó de medir el proceso inflacionario del área metropolitana para convertirse en una estimación a nivel nacional, en la cual se empleó una metodología novedosa que demandó más de cuatro años de trabajo. También se preparó un nuevo indicador de PBI actualizando la base de cálculo. En el organismo se comenzó a elaborar además una nueva medición de la pobreza multivariada (contemplando ya no sólo los ingresos de la población sino otras necesidades elementales como el acceso a los servicios). Estas tareas no fueron suficientes para recomponer la confianza de la sociedad en las cifras de la entidad.

El hombre elegido por Cambiemos para hacerse cargo del Indec fue una de las figuras clave de la oposición para potenciar el descrédito del organismo. “Publican informes sobre datos de inflación falsos construidos a fin de beneficiarse y beneficiar con ganancias extraordinarias a algunos agentes del mercado financiero”, aseguró Moreno tras denunciar a Finsoport, la consultora de Todesca, y sancionarla con más de 500.000 pesos por difundir indicadores de variación de los precios no rigurosos. La Justicia, no obstante, terminó poniéndose del lado de Todesca para asegurar que el ex secretario de Comercio había caído en una situación de abuso de autoridad. Moreno terminó procesado en 2013 en un dictamen del juez Claudio Bonadio.

Todesca, pese a ser dueño de una de las consultoras de cierto renombre en la city, no tiene formación técnica en temas de estadística. En su curriculum figura que realizó estudios de licenciatura económica en la Universidad de Buenos Aires, en tanto que cursó un posgrado en administración de planes de corto plazo en el Centro Interamericano de Capacitación en Administración Pública. Al igual que la mayoría de los funcionarios económicos del nuevo gobierno, se desempeñó como consultor externo de distintos organismos internacionales en los que se destacó la Comisión Económica para América Latina, el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial. En la gestión pública fue viceministro de Economía en la gestión de Eduardo Duhalde (2002). Asu vez, en la gestión privada se destaca por haber sido hasta 2001 parte del directorio de Visa para Latinoamerica, característica que comparte con otros funcionarios designados por Macri, que en la mayoría de los casos formaron parte de la dirigencia de grandes multinacionales.