La recaudación se ubicó en 168.318 millones de pesos en septiembre, al incrementarse 30 por ciento respecto del mismo mes del año pasado, según informó ayer la AFIP. En lo que va del año, los tributos sumaron 1.445.142 millones de pesos, con un alza del 28,0 por ciento en relación con el mismo período de 2015. Los recursos embolsados por el Estado a través de impuestos registraron una fuerte caída en términos reales, puesto que la inflación avanzó en los últimos 12 meses al 43,5 por ciento, según el relevamiento de la dirección de estadística de la Ciudad de Buenos Aires. El menor consumo por la pérdida de poder adquisitivo de la población, la quita de aranceles a la exportación y el avance de la desocupación son elementos clave para explicar el flojo desempeño de la recaudación.

El IVA anotó 53.857 millones de pesos en septiembre, con un aumento de 38,4 por ciento interanual. La cifra puede desagregarse en IVA interno (DGI), el cual sumó 38.101 millones de pesos, con una suba de 34,8 por ciento y en IVA aduana (DGA), que anotó 16.158 millones, con un incremento del 51,6 por ciento. La facturación de los comercios está cayendo en términos reales, lo que muestra un retroceso en las cantidades consumidas, en particular, de los segmentos de menor capacidad de compra. A su vez, el ingreso de mercadería importada aumenta en términos reales y compite contra los fabricantes locales.

Ganancias es uno de los impuestos que anotó mayor caída en términos reales. Sumó 34.425 millones de pesos en septiembre, al avanzar 13,6 por ciento, unos 30 puntos porcentuales menos que los precios. La caída de las ventas de los negocios, la pérdida de margen por el alza de la estructura de costos y los cambios en el impuesto a las Ganancias sobre los salarios explicó el desempeño. Otro de los tributos vinculados al ritmo de actividad económica que aumentó por debajo de la inflación fue el impuesto al cheque (créditos y débitos sobre cuenta corriente), al sumar 12.063 millones de pesos, con un alza de 38 por ciento.

Los aportes personales totalizaron 17.533 millones de pesos, con una suba de 29,9 por ciento, al tiempo que las contribuciones patronales anotaron 26.531 millones, con aumento de 36,4 por ciento. La negociación de las paritarias en la mayoría de las ramas cerró por debajo de la inflación, lo que provocó la desaceleración en la recaudación en concepto de la Seguridad Social. También impactó el aumento del desempleo, que alcanzó en la primera mitad del año 9,3 por ciento y que, según expertos en mercado laboral, ya se ubica por encima del 10 por ciento.

Los aranceles de exportación (retenciones) marcaron 5172 millones de pesos, una suba del 9,7 por ciento. La devolución de impuestos a sectores concentrados del campo, pese a las declaraciones del equipo económico de Mauricio Macri, no generó un salto en el volumen de las exportaciones pero aceleró el desfinanciamiento del sector público, que este año cerrará con un déficit fiscal de 5 puntos del PIB, según las estimaciones de las principales consultoras del mercado. En lo que refiere a los aranceles de importación, se computaron 5310 millones de pesos, con un alza del 68,1 por ciento, lo que se debe a la desregulación del comercio.

En el detalle del informe de recaudación de la AFIP, se mencionó que el rubro “otros impuestos” computa el dinero embolsado por el blanqueo (Ley 26.760), entre otros impuestos como el adicional sobre los cigarrillos. En septiembre, se registraron 1199,1 millones de pesos, un aumento de sólo el 0,4 por ciento interanual. En agosto, este rubro había computado 2287 millones de pesos, aunque sólo 42 millones estuvieron asociados a la exteriorización de capitales.