ECONOMíA
› BUSCAN ELIMINAR LA INDEXACION DE CREDITOS HIPOTECARIOS
Cuando el CER pierde razón de ser
Los legisladores oficialistas tratan de compatibilizar un proyecto que busca salvar a viviendas únicas alquiladas o hipotecadas.
› Por Raúl Dellatorre
Los bloques de legisladores justicialistas de ambas cámaras iniciaron ayer la tarea de compatibilizar los distintos proyectos en danza para la eliminación del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) como fórmula de indexación de deudas hipotecarias. A medida que avanza el proyecto de canje de depósitos del corralito por bonos, se consolida en el Congreso la idea de que “el CER pierde razón de ser”. El proyecto unificado aún tiene temas pendientes, pero en otros ya hubo acuerdo: el reemplazo del CER por un coeficiente de variación salarial (CVS) sólo sería aplicable a créditos con garantía hipotecaria sobre vivienda única, cualquiera sea el destino dado al dinero. El proyecto de ley también favorece a locatarios de vivienda única.
Representantes de la bancada justicialista en Diputados, encabezados por Humberto Roggero, le transmitieron ayer al presidente del Banco Central, Mario Blejer, su preocupación por la suerte de los deudores hipotecarios que podrían perder sus viviendas por la cláusula de indexación. Otro grupo de legisladores buscó interesar al Palacio de Hacienda en la propuesta de eliminar al CER, sin lograr más que evasivas. “Se guardan la opinión hasta último momento, pero ahora hay mayor conciencia en Economía de que es un problema muy grave y que en agosto puede estallar la protesta”, señaló una fuente del bloque oficialista en el Senado. Oscar Lamberto, que acaba de regresar de la Secretaría de Hacienda al Senado, y Rodolfo Frigeri, antes estrecho colaborador de Eduardo Duhalde y hoy diputado, han sido los nexos más activos con el equipo económico en las últimas horas.
Reflejo de ese estado de potencial protesta, ayer se presentaron alrededor de cuatro mil recursos de amparo contra el CER, ante la interpretación de que vencía el plazo para ese tipo de presentaciones. Pero tanto en los juzgados en lo Contencioso Administrativo como profesionales con actuación en el fuero negaron esa posibilidad. El aluvión de presentaciones colapsó al sistema, lo cual obligó a la Cámara del fuero a explicar que la mayor parte de los escritos ingresados ayer “recién serán subidos al sistema en los próximos días”.
Semejante movilización de deudores sumó elementos a quienes sostienen la urgencia de eliminación del índice de actualización de créditos. Ayer, legisladores de ambas bancadas justicialistas con distintos proyectos en tal sentido trabajaron en la unificación de una propuesta. Entre otros, participaron de la discusión los diputados Omar Becerra y Rodolfo Frigeri, y los senadores José Luis Gioja y Marcelo López Arias. Un proyecto de Gioja, proponiendo reemplazar el CER por un índice salarial, el CVS, ya cuenta con media sanción del Senado. Esta propuesta sólo contempla la sustitución del índice para los créditos hipotecarios y los alquileres de vivienda única. Este proyecto y el presentado por Becerra fueron el eje del debate de ayer, que se desarrolló en torno a los siguientes puntos:
- Coeficiente: la eliminación del CER buscará proteger las propiedades utilizadas como vivienda única. Por eso alcanzaría a todos los créditos con hipoteca sobre las mismas, cualquiera sea la entidad prestamista (bancaria o no) y cualquiera haya sido el destino dado por el tomador al dinero. Es decir, un empresario pyme que hipotecó su casa para volcar la plata a la empresa sería beneficiado por la eliminación del CER. Lo mismo vale para un particular que compró un auto con el crédito, pero hipotecó su vivienda para sacarlo. El coeficiente de reemplazo, el CVS, no está definido en el proyecto de ley, pero se conformaría de un promedio de distintos indicadores salariales elaborados por el Indec (peón industrial, de la construcción, rural, etc).
- Topes: se acordó dejar de lado los topes por monto (se había propuesto 100 mil pesos de valor original) así como de proporciones salariales de las cuotas (30 por ciento, según la propuesta). “Hubiera sido una invitación a ocultar ingresos, sobre todo en sectores informales”, señaló uno de los participantes de la negociación.
- Tasas: serán las fijadas por el Banco Central al momento de pesificar y congelar los créditos.
- Desocupados: se dejó de lado la propuesta de otorgar un período de espera para los que pierdan su trabajo, ante la desigualdad que genera entre quienes pueden demostrarlo (trabajadores formales) y quienes no.
Entre los puntos no acordados, el más trascendente es qué pasará con el resto de créditos, no hipotecarios, si el plan de bonos prospera. Muchos coinciden en que el CER perdería sentido: pocos dicen cómo lo reemplazarán. El lunes sigue la discusión. Si hay acuerdo, la intención es tratarlo durante la semana próxima en Diputados, en base al proyecto con media sanción de Gioja.