ECONOMíA
› AUMENTO DE EXPORTACIONES DE GAS EN EL PRIMER SEMESTRE
Una crisis que afuera no existió
En el primer semestre del 2004, las exportaciones de
gas crecieron el 7,6 por ciento. Chile es el país que más aumentó sus compras. Y sus quejas.
› Por Claudio Scaletta
A pesar de las supuestas restricciones en la oferta energética, las exportaciones de gas aumentaron el 7,6 por ciento durante el primer semestre del año. Los datos de la Secretaría de Energía, relevados por el investigador Ricardo De Dicco, muestran que la promoción del ahorro del consumo interno desde mayo, que adicionalmente provocó la aplicación de mayores tarifas de carácter punitorio para quienes aumentaran sus consumos, no tuvo su contrapartida en las ventas al exterior. La legislación vigente prohíbe taxativamente las exportaciones de gas natural cuando el mercado interno se encuentra desabastecido. La crisis energética dio lugar a cortes selectivos que afectaron la producción de muchas industrias.
Los datos pueden generar sorpresa, pero resultan evidentes a la luz de los cambios de la infraestructura energética producidos a partir de la década pasada. Desde que la antigua Gas del Estado construyó y puso en operación, en 1988, el Neuba II, no se incorporó ningún nuevo gasoducto para el abastecimiento del mercado interno. Mientras 13 millones de argentinos carecen de acceso al gas natural por redes, entre 1996 y 2003 se construyeron y entraron en operación 10 nuevos gasoductos para la exportación. Según reseña De Dicco en un trabajo realizado para el Instituto de la Energía y la Planificación de la Fundación Arturo Illia, 7 de estos gasoductos tienen por destino Chile, 2 Uruguay y 1 Brasil.
Cuando se analizan las exportaciones del período 2000-2004 (ver cuadro), se observa que en el primer semestre del año las ventas al exterior crecen el 7,6 por ciento citado. Si se compara contra el 2003, el aumento llega al 13 por ciento. Si las ventas se consideran por destino, Chile crece por encima de la media, el 7,8 por ciento. Además, sobre un total de más de 3500 millones de metros cúbicos, cerca de 3300 millones se destinaron al país trasandino, lo que representa alrededor del 94 por ciento del total.
Si se consideran las ventas mes a mes, Chile recibió en enero un 26 por ciento más de gas que en el mismo período del 2003, en febrero 33,5 por ciento más. En el primer mes de la supuesta “crisis del gas”, marzo, las exportaciones crecieron el 9 por ciento. Abril fue el primer mes sin variaciones y mayo el único que registró una caída del 12 por ciento. En junio, las entregas de fluido recuperaron los mismos niveles del 2003 y superaron en 5,6 por ciento lo vendido un mes antes. La investigación de De Dicco concluye que las “restricciones” aplicadas a las exportaciones no tuvieron “significación relevante” durante los tres meses de la supuesta crisis; marzo, abril y mayo.
Los datos sobre Chile sí son significativos en otra dimensión. Durante la crisis, desde el vecino país no se ahorraron críticas por la supuesta “falta de seriedad” de la Argentina en materia de compromisos internacionales. Y ello a pesar de que las exportaciones no son controladas por el Estado nacional sino por un oligopolio privado. En el 2003, por ejemplo, 8 empresas exportaron por 274,5 millones de dólares, el 85,7 por ciento de los 320,3 millones vendidos al exterior. De este total, 141,4 millones, el 41 por ciento, fueron comercializados por la española Repsol YPF. El porcentaje llega al 46,3 por ciento si se agregan las ventas de su controlada Pluspetrol.
Además de que las exportaciones hayan aumentado a pesar de la crisis, y de que los beneficiarios sean un reducido grupo de multinacionales, existe un tercer problema: el achicamiento del horizonte de reservas en el contexto de la falta de inversiones en exploración. Si se dan por válidas las proyecciones realizadas por el Enargas, para el 2010 se espera que las exportaciones hayan crecido sólo un 11 por ciento más y la producción total de gas natural, el 67 por ciento. Si esto se cumple, de no mediar nuevos descubrimientos, sólo habría reservas para 12 años más.
Por último, la investigación repasa la legislación vigente según la cual queda expresamente prohibido exportar si el mercado interno no está satisfecho. La Ley 17.319 sostiene: “La exportación de hidrocarburos y susderivados es legislada en estrecha coordinación con el aseguramiento de la autosuficiencia del país en la materia, ya que el Poder Ejecutivo la autorizará siempre que se trate de cantidades no requeridas para la adecuada satisfacción de las necesidades internas”. Esta idea es reforzada por el artículo 3 de la Ley 24.076, según el cual “las exportaciones de gas natural deberán, en cada caso, ser autorizadas por el Poder Ejecutivo Nacional, dentro del plazo de 90 días de recibida la solicitud, en la medida en que no se afecte el abastecimiento interno”.
Subnotas