Un núcleo de 16 diputados del ala progresista –socialistas, Izquierda Unida, ARI, ex frepasistas y desprendimientos varios del centroizquierda– impulsará un proyecto de ley para declarar “odiosa” a la totalidad de la deuda pública externa contraída por la dictadura militar y, por tanto, considerarla “ilegítima y pasible de resarcimiento a favor del Estado nacional”. El grupo de legisladores encabezado por Mario Cafiero, Alicia Castro, Héctor Polino, Eduardo Macaluse y Claudio Lozano pidieron el tratamiento de la propuesta en el recinto en sesión especial el 16 de noviembre. “Luchar contra la deuda es estar a favor de la Argentina”, dijo Cafiero al cerrar su discurso, citando palabras de Alejandro Olmos, el fallecido investigador que llevó el tema de la deuda a la Justicia en los ’80, logrando que se la declarara “ilegal” e “ilegítima”.
Alicia Castro y Claudio Lozano coincidieron en que existe amplio consenso social en repudiar la deuda. “Cada vez hay más conciencia social entre los argentinos, y mayor reconocimiento internacional, a que la deuda argentina es la que pone en crisis al FMI”, señaló la dirigente de los aeronavegantes. El dirigente de la CTA, en tanto, resaltó el contraste entre “un consenso político formidable” contra la deuda, la presión de los organismos internacionales y las políticas de ajuste y la representación minoritaria de quienes expresan ese punto de vista en el Congreso. “Está claro que hay una deficiencia nuestra al no saber aprovechar ese consenso social”, opinó Lozano, quien subrayó que el Gobierno también podría haber tomado nota de esa opinión mayoritaria y “hacer verdad lo que el discurso (oficial) dijo, en cuanto a la responsabilidad de los organismos de crédito” en el nivel de endeudamiento y de deterioro económico del país.
“Hubiera sido posible discutir a escala nacional e internacional si el FMI puede ser juez y parte en la reestructuración de la deuda”, señaló Lozano en alusión a ese consenso mayoritario que repudia los condicionamientos. “Hubiera sido posible no tener que contratar a los bancos privados para ver qué deuda tenemos y designar al Banco Central o al Banco Nación como agentes colocadores, en vez de la banca ligada a los acreedores”, completó.
Varios oradores se pronunciaron en contra de la delegación de poderes hecha por el Congreso en favor del Ejecutivo para resolver en materia de deuda externa. “No hay excusas, no son válidas estas delegaciones de poderes; este es el peor de los superpoderes que se le puede otorgar al Ejecutivo, porque bien sabemos que se termina delegando el poder en favor de los mismos bancos acreedores”, expresó Mario Cafiero.
El proyecto que expuso Cafiero en el edificio anexo del Congreso, en el mismo acto que homenajeó a Alejandro Olmos, impulsa además una investigación “a fin de determinar las consecuencias (del endeudamiento contraído por la última dictadura) sobre períodos posteriores y deslindar responsabilidades de funcionarios públicos, personas físicas o jurídicas de derecho privado o de derecho internacional actuantes durante la dictadura militar referida”. Esto es, amplía el alcance de la investigación a aquellos organismos (FMI, Banco Mundial) y entidades (bancos) que hayan actuado como facilitadores, promotores o ejecutores de los préstamos que comprometieron al país.
El legislador del bloque Soberanía Popular, ex arista, recordó que el concepto de deuda “odiosa e ilegítima” no es nuevo, sino que proviene de una doctrina de más de cien años, “que hoy Estados Unidos ha desempolvado para pedir la anulación de la deuda de Irak, bajo la excusa de que fue contraída por un dictador”. Esta postura de repudio a la deuda es respaldada, repasó luego Alicia Castro, por organismos sociales del mundo que participan del Foro Social de Porto Alegre y por la organización londinense Justicia para Argentina, encabezada por Alan Freeman, que además cuestionan que los organismos internacionales sean “acreedores privilegiados” a la hora de cobrar.
Por otra parte, Cafiero dijo que “frente a los múltiples juicios abiertos en distintas partes del mundo contra la Argentina a consecuencia del default, nosotros vamos a intentar introducir este concepto de deuda ilegítima y odiosa, empezando por la presentación que haremos ante la Corte Internacional de Alemania en los próximos días”. “Hoy que se habla tan frecuentemente de secuestros y rescates en torno del tema de la seguridad”, aludió Cafiero, “hay que recordar que no hubo mayor secuestro que el perpetrado por la dictadura contra toda una sociedad, cuyo rescate seguimos pagando y es esta deuda externa”.