La situación fiscal no mejora. En marzo, el sector público nacional registró un déficit base caja de 1424,7 millones de pesos, cifra que es de todos modos 50,9 millones de pesos inferior al desequilibrio de igual mes del año pasado.
A pesar de que en marzo se redujeron los gastos en 394,5 millones de pesos en comparación con el mismo mes de 2001, el déficit no cayó. Esto desmiente tanto que el Gobierno no haya hecho un fuerte ajuste en sus erogaciones, sino la teoría de que el ajuste es necesario para salir de la crisis, tal como plantea el FMI y los economistas ortodoxos.
Los 394,5 millones de pesos que se gastaron de menos estuvieron distribuidos entre prestaciones a la seguridad social (-107 millones), remuneraciones (-69,4 millones) y bienes y servicios no personales (-53,8 millones). Pero el mayor ahorro se produjo en la postergación de los pagos de intereses de la deuda, con 867,8 millones. Sin embargo, esos recortes se vieron atenuados por las mayores transferencias a las provincias, por 766 millones.