“Esto es insoportable. Insostenible en el largo plazo. Tenemos al Estado como socio oneroso, que sólo parece esperar nuestro crecimiento para aumentar su recaudación. Buscamos un socio más solidario, más comprometido con nuestra gestión.” El titular de la Sociedad Rural Argentina, Luciano Miguens, inauguró con un discurso repleto de quejas y reproches al Gobierno la edición número 119 de la exposición de Palermo. Néstor Kirchner no estuvo para escucharlo, lo que también fue recriminado por el empresario, quien no olvidó mencionar ni uno de los clichés de los conservadores locales.
La defensa del Gobierno, considerada tímida por funcionarios con despacho en la Casa Rosada, corrió por cuenta del vicepresidente Daniel Scioli y del subsecretario de Agricultura, Javier Urquiza. Este último llegó a admitir que el Ejecutivo “está dispuesto a dialogar y hasta revisar acciones en pos de mantener la estabilidad social y económica”. Si bien no dio más detalles, la mayor crítica de los ruralistas es contra las retenciones. El funcionario pidió comprensión a los empresarios al señalar que “aún existe una gran cantidad de argentinos” que vive en la pobreza.
Scioli, en tanto, les recordó a los hombres del establishment rural las acciones del Gobierno en favor del sector. “Lo importante son las obras de infraestructura, abrir nuevos mercados, una política monetaria y fiscal y un superávit que, por primera vez en muchísimos años, permite un crecimiento sostenido y da marco para el desarrollo de nuevos negocios”, indicó. Ante una consulta de la prensa, el vicepresidente negó que Kirchner “le de la espalda” a la Sociedad Rural y argumentó que, en cambio, “ha puesto en marcha una importante reorganización económica”. Además, sugirió que el Presidente concurriría a la exposición en los próximos días.
Una inesperada defensora de los argumentos de Miguens fue Elisa Carrió. La titular del ARI reclamó la eliminación de las retenciones al sector ganadero y advirtió que la ausencia de Kirchner en la inauguración de la Rural “puede ser entendida como un desprecio” para los productores del interior que “hacen enormes esfuerzos para exponer en Palermo”. “Tenemos que tener una política de clara promoción al campo y al sector ganadero”, insistió Carrió en declaraciones radiales. “El Presidente tiene algunos prejuicios porque se confunde: en la muestra de la Sociedad Rural están todas las sociedades rurales del interior del país, que no tienen nada que ver con la Sociedad Rural de Buenos Aires”, destacó.
Por su parte, Miguens comparó la situación del productor agropecuario argentino con la del europeo, que “en lugar de impuestos goza de subsidios” y se quejó de que “allí les regalan y aquí les quitan” a los que integran el sector. “Las retenciones limitan la competitividad. En los últimos años hubo una total ausencia de política agropecuaria”, sentenció.
Después de quejarse por “el aumento del gasto público”, concluyó que “trabar las exportaciones como sistema de control de precios ha demostrado ser una medida inútil, de neto corte electoralista”.