“Los tipos de derecha son más felices que los de izquierda.” A esa conclusión llega Rafael Di Tella, un economista argentino que enseña en la Universidad de Harvard y que en los últimos años se especializó en un campo poco explorado de la profesión: la economía de la felicidad. Di Tella se basa en una serie de encuestas realizadas en Estados Unidos y Europa para medir la percepción de la gente frente a la desigualdad social.
“La idea era averiguar cuánto molesta la desigualdad en el capitalismo norteamericano en comparación con el europeo”, relata el investigador. Los resultados fueron, por lo menos, llamativos: “En Estados Unidos, donde hay mucha más desigualdad que en Europa, no molesta, o incomoda menos. Los pobres no lo ven como algo terrible, porque tienen la esperanza de ascenso social”. Más aún, según las encuestas analizadas por Di Tella, “los ricos de izquierda, al estilo Michael Moore (el famoso documentalista de Fahrenheit 9/11), muestran menores niveles de felicidad que los pobres; o que las personas de derecha, que ven un pobre revolviendo un tacho de basura y piensan: éste es un vago, debería ir a trabajar”. Parece un chiste pero, de acuerdo con los sondeos de percepción, los tipos con un buen pasar económico y sensibilidad social en Estados Unidos son más desdichados que los que realmente la están pasando mal.
Uno de los mitos que derriban los últimos estudios sobre el tema es que en Estados Unidos hay una mayor movilidad social. “Esto no es así. Además, la sociedad europea es mucho más equitativa que la norteamericana, lo cual es obvio si se tiene en cuenta que mientras en Estados Unidos tenés que pagar por la salud y la educación, en Europa las provee el Estado”, explica Di Tella.
Sin embargo, en Europa se percibe que la inequidad es un problema mayúsculo: “Para el europeo, el pobre es pobre porque tuvo mala suerte, y hay que ayudarlo; el norteamericano, en cambio, cree que no trabajó lo suficiente para alcanzar el sueño americano”, dice el experto en felicidad.
En Argentina, ¿cómo se percibe la desigualdad? “En algunos aspectos, la sociedad argentina se parece mucho a Estados Unidos, con esto del inmigrante que vino a hacer la América. Pero por otro lado hay un discurso increíblemente solidario, que se ocupa de los excluidos del sistema. Claro que al mismo tiempo nadie paga los impuestos. Estoy a full estudiando el tema, pero por ahora no le puedo dar una respuesta”, se excusa el profesor de Harvard.
Di Tella, quien evalúa por estos días la posibilidad de regresar a vivir a Argentina, es hijo de Guido, el ex canciller de Carlos Menem que inmortalizó la frase de las “relaciones carnales” con Estados Unidos.
–¿Y usted es de izquierda o de derecha? –pregunta Página/12.
–En Estados Unidos soy de izquierda. Pero en Argentina soy un facho espectacular. El problema es que acá los tipos que dicen que son de izquierda proponen bajas de salarios.
–¿Por ejemplo?
–Kirchner, Lavagna. Desde la devaluación ha habido una transferencia brutal de ingresos de los trabajadores a los empresarios. Un dólar alto implica necesariamente salarios bajos.
Di Tella es de los que cree que no había que abandonar la convertibilidad. Pero ésa es otra discusión.