La Federación de Expendedores de Combustibles decidió ayer levantar el paro anunciado para los días miércoles y jueves de esta semana en todas las estaciones de despacho de GNC. El cambio de criterio fue resuelto por la entidad que lidera Carlos Calabró tras un encuentro con funcionarios del área de Energía en el que, según fuentes empresarias, las autoridades asumieron el compromiso de revisar la reglamentación de las compras de gas a través del mercado electrónico. Según la Federación, al dejar de adquirir el gas natural a las distribuidoras y pasar al mayorista, el precio del GNC en surtidor sufriría un incremento del 30 por ciento.
El llamado al paro por la FEC había generado una polémica incluso entre las propias entidades del sector. Enrique Fridman, titular de la Cámara de Expendedores de GNC, había manifestado ayer su desacuerdo con la medida, antes de la reunión que se realizó a última hora de la tarde en el Palacio de Hacienda. “El supuesto aumento no existe por ahora; lo que puede aumentar es el gas en boca de pozo, pero la incidencia (en el precio final) no la conocemos todavía, y podría ser mínima”, expresó, desacreditando así los dichos de Calabró, que anticipaban un aumento del 30 por ciento por el cambio de régimen de comercialización del gas.
Según un decreto del año 2003, las estaciones de servicio de GNC debían dejar de actuar como usuarios residenciales, comprando el gas natural a las distribuidoras de su área, para pasar a comprar el suministro en el mercado mayorista. La reglamentación por decreto indicaba que esta modalidad se pondría en práctica a partir de enero, pero una resolución de la Secretaría de Energía publicada el viernes último extendió ese plazo al 1º de marzo.
Para Calabró, esta nueva modalidad implica que las estaciones pasarían a pagar el precio del gas que abonan los industriales y grandes comercios, tarifa que sufrió aumentos en los últimos años mientras el gas para consumo domiciliario permaneció congelado. De allí el cálculo de una incidencia del 30 por ciento en el surtidor.
En el encuentro de ayer, del que participó además de Calabró el titular del Enargas, Fulvio Madaro, el subsecretario de Combustibles, Cristian Folgar, y funcionarios de Economía, se tomó nota de esta demanda y de las de otros grandes usuarios, como los consorcios de departamentos que compran el gas natural en conjunto para calefacción (losa radiante) u otros consumos comunes. Por volumen, este consumo también quedaría obligado a concurrir al mercado mayorista y pagar el gas más caro.
La Resolución 2020 de la Secretaría de Energía dispuso las fechas en que los distintos tipos de usuarios pasarán a abastecerse del mercado electrónico del gas (MEG), dejando de recibir el suministro de las distribuidoras. Los grandes consumidores (más de 365 mil m3 anuales) empezarán a recibir el combustible directamente de los productores (en punto de ingreso al sistema de transporte) desde el 1º de enero, pero tendrán plazo hasta el 28 de febrero para suscribir los contratos de suministro, manteniendo hasta esa fecha los términos y condiciones hoy vigentes entre productores y distribuidores. Los consumos medios (180 mil a 365 mil m3/año) pasarán a abastecerse del productor a partir de marzo. Algunos de estos criterios, o al menos la forma en que se llevarán a la práctica, podrían ser revisados de acuerdo con lo que ayer se conversó en Economía.