“Entre julio y setiembre hay 5 mil millones de dólares en vencimientos de la deuda, eso nos impone una fecha natural de finalización de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional.” El ministro de Economía, Roberto Lavagna, dejó claros ayer los plazos que le quedan al Gobierno para obtener ayuda de los organismos internacionales aunque, lógicamente, también se mostró optimista sobre el resultado. “Hoy no veo ninguna razón para que no haya acuerdo con el Fondo”, afirmó en una entrevista concedida al diario español El País.
Las declaraciones de Lavagna están en línea con la estrategia planteada por el Gobierno para los próximos meses: completar las negociaciones con el FMI y llamar a elecciones anticipadas. “Lo que me interesa ahora es dejar una economía funcionando razonablemente, negociando todos sus compromisos con el exterior, y el plazo que me doy para cumplir con esta normalización es el segundo semestre de este año”, declaró el ministro, y volvió a reiterar la importancia de llegar a un acuerdo con el Fondo, no sólo para el Gobierno, sino también para los sectores más concentrados de la economía. “Sólo un acuerdo con el organismo va a permitir abrir la negociación de tarifas y contratos de las empresas privatizadas, abrir la negociación de la deuda privada que está en cesación de pagos”, afirmó.
En cuanto al problema del corralito financiero, el funcionario admitió que “sin la menor duda, es la gente, es el ahorrista, el cliente de los bancos el que está haciendo el esfuerzo más grande. Esto es lo más injusto y lo que ha producido un impacto social tan negativo”. Lavagna, quien viene manteniendo una relación tensa con los banqueros –que se oponen a devolver los depósitos anticipadamente con recursos propios–, opinó que “los bancos tienen un papel central, que es el de aconsejar a sus clientes y ayudarlos a tomar una decisión muy interesante que es el bono, porque el bono va a tener una rentabilidad muy alta”.
El ministro también confirmó que en dos semanas viajará a Washington para continuar con las interminables negociaciones en busca de ayuda internacional que permita estabilizar la situación económica y social. “Voy a entrevistarme con el director del FMI, la subdirectora Krueger, y con Anoop Singh, que ahora es responsable de todo el hemisferio occidental”. La idea del viaje es que sirva para acordar los “puntos de carácter más político”, luego de que la misión del FMI, que estará hasta el viernes en el país, informe a los directores del organismo sobre la viabilidad del plan económico. “Se supone que esta semana se avanzará mucho. Después siempre quedan puntos de carácter más político que espero discutir allá, en algún punto volverá la misión y nos iremos acercando a la etapa de cierre”, declaró el ministro.