ECONOMíA
Con ayudas así, hay pobres en el mundo para rato
Un informe de las Naciones Unidas muestra el escaso aporte de los programas de reducción de deuda a países pobres para resolver sus problemas de fondo. Varios pagan hoy más que antes.
Un informe de la Unctad conocido ayer reveló que el número de personas que viven en la extrema pobreza –con menos de un dólar por día– en los 49 países más pobres del mundo se duplicó desde mediados de la década del 60. La razón, según el órgano de las Naciones Unidas, es la existencia de un “círculo vicioso internacional”. El informe mostró también algunos efectos de la ayuda económica multilateral: entre 2003 y 2005, 4 de los 20 países pobres muy endeudados que calificaron para la “iniciativa de reducción de deuda”, tendrán que hacer pagos superiores a los afrontados en el período 1998-2000.
A pesar de la existencia de programas internacionales de ayuda y de la presencia de organismos internacionales ad hoc, la pobreza en el mundo no deja de aumentar. La copiosa burocracia de estos organismos produce, al menos, rutinarias estadísticas que revelan los efectos de la globalización. El informe 2002 de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad) sobre la situación de los Países Menos Adelantados (PMA) señaló que el 50 por ciento de los habitantes de los 49 países más pobres, 307 millones de personas, tiene un nivel de consumo per cápita de 0,64 dólares por día. En tanto, el 81 por ciento de la población de estos países vive con menos de dos dólares diarios.
Las tendencias de la pobreza extrema en estos países contrastan con la situación de 22 países en desarrollo de baja renta per cápita considerados en la muestra, entre ellos China, India e Indonesia, donde la pobreza extrema se redujo en las últimas dos décadas. Al momento de explicar las razones de la profundización de la pobreza, la Unctad señala la estrecha relación entre la dependencia de las exportaciones de productos primarios y los bajos niveles de ingreso per cápita. El 69 por ciento de la población (contra un 63 entre 1981-83) de los PMA exportadores de productos básicos no energéticos vive con menos de un dólar diario.
La tesis del informe es que “la pobreza en la mayoría de los PMA es omnipresente y persistente porque se encuentran inmersos en el círculo vicioso internacional de la pobreza”. De acuerdo con esta perspectiva, cuando la mayoría de la población gasta menos de 2 dólares diarios, la mayor proporción del PIB se destina a la adquisición de recursos básicos y resta poco margen para financiar los servicios públicos fundamentales y el desarrollo.
En este contexto existe una línea argumental que sostiene que estos países padecen por su falta de integración a la economía mundial. Sin embargo, los datos del informe muestran una realidad distinta. Las exportaciones e importaciones de los PMA representan en promedio el 43 por ciento de sus PIB, un nivel medio de integración superior al de los países más ricos del mundo agrupados en la OCDE. El problema, entonces, no es el nivel de integración, “sino más bien la forma que adopta”. Es más, “las relaciones comerciales y financieras externas forman parte del círculo vicioso de la pobreza”.
El punto central es que, al ser estos países altamente dependientes de las exportaciones de productos primarios, están sometidos a lo que el informe denomina “volatilidad y descenso” de los precios de estas commodities. Según la Unctad, el índice combinado de precios de productos básicos no energéticos representa un valor equivalente a la mitad de su valor anual en el período 1979-81. La razón principal son los subsidios aplicados en los países ricos, algo que el informe sólo reconoce marginalmente.
El último punto reflejado en el informe es la “estrecha relación entre la pobreza y la acumulación de una carga excesiva de deuda externa”. Como muestra, se destaca la situación de los países incluidos en el programa de reducción de deudas: en 2003-2005, 4 deberán pagar más que antes, 6 reducirán sus pagos anuales en menos de 15 millones de dólares, y sólo 3 los habrán disminuido en más de 50 millones.