El 66 por ciento de las pequeñas y medianas empresas de la Capital Federal se manifestó perjudicado por la devaluación del peso, según surge de un relevamiento efectuado por el Banco Ciudad de Buenos Aires. El estudio fue realizado en abril y mayo últimos por la Coordinación de Investigaciones Económicas del Banco Ciudad, que conduce Alejandro Banzas. De ese 66 por ciento que se considera perjudicado por la devaluación, la mayoría señaló que utiliza más de un 25 por ciento de insumos importados.
En tanto, el 34 por ciento restante de las pymes consultadas reconoció que la devaluación le resulta favorable, no sólo por la pesificación de sus créditos en dólares sino también por la ventaja generada por el lado del sector externo de la economía, ante un escenario fuertemente recesivo. “Esto último quedó ampliamente de manifiesto cuando señalaron que en caso de conseguir crédito, el mismo sería destinado a financiar exportaciones y a la capacitación del personal a diferencia de lo señalado meses atrás, antes de la ruptura de la convertibilidad, donde tenía mayor nivel de prioridad el financiamiento a clientes e inversiones en general”, dice el informe.