El primer trimestre del año cerró con un crecimiento del 8,6 por ciento, una tasa incluso superior a la expansión del 8 por ciento registrada durante el primer trimestre de 2005. Así, la actividad económica cumplió cuatro años (16 trimestres) de crecimiento ininterrumpido. La industria y la construcción continúan siendo el motor de la recuperación. A su vez, en abril la producción industrial aumentó 7,7 por ciento.

Pese a los pronósticos en contrario, la economía todavía crece a tasas chinas. El Indec difundió ayer el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), una variable aproximada de la medición del producto bruto. En marzo el EMAE aumentó 7,7 por ciento, contra igual mes del año pasado, algo superior al 7,5 por ciento de crecimiento que mostró en marzo de 2005. Pero, además, a los actuales niveles de actividad, la economía se halla casi un 10 por ciento arriba del pico de producción alcanzado en el segundo trimestre de 1998, justo antes de que comenzara la depresión que llevó a la crisis financiera de 2001. Según los informes del Ministerio de Economía, el PBI per cápita también se ubica por encima de aquel máximo del año ’98.

En los datos difundidos por el Indec no aparecen síntomas de desaceleración importantes en el ritmo de expansión. En marzo, la tasa acumulada anual de crecimiento era del 8,6 por ciento, un poco por debajo de las tasas evidenciadas entre agosto y octubre del año pasado (que superaban el 9 por ciento). Pero el cambio no luce relevante. “La evolución del EMAE desde octubre de 2005 refleja una saludable y lenta convergencia a las tasas de crecimiento sostenibles de largo plazo de la economía, que evitarán futuros cambios abruptos en la evolución de la actividad económica”, dice el informe distribuido por el Ministerio de Economía.

La utilización de la capacidad instalada en el primer trimestre de 2006 es hoy la misma que en 2005. “Dado que la producción industrial creció durante el período la conclusión es que hubo un aumento sostenido de la inversión en el sector industrial”, afirman en el equipo de Miceli.

Durante el primer trimestre de 2006, por primera vez desde el inicio de la recuperación el sector servicios creció más (8,5 por ciento) que el de bienes comercializables internacionalmente (7,2 por ciento), el más favorecido por la devaluación. Entre los servicios, se nota, tras la crisis, la fuerte recuperación del sector financiero: en el primer trimestre, se agrandó un 22,8 por ciento. Por su parte, “transporte y comunicaciones” subió 13,4 por ciento y “comercio”, 9,3 por ciento.

Pero, sin duda, el sector más dinámico por su efecto multiplicador en el resto de la economía es en la actualidad la construcción, que en el trimestre se expandió un asombroso 22,7 por ciento.

El Indec difundió también ayer un anticipo del EMI (estimador mensual industrial), del mes de abril, que muestra una suba del 7,7 por ciento. Así, el indicador acumula 47 meses consecutivos de aumento. La industria automotriz impulsa la expansión con un crecimiento interanual del 28,4 por ciento; seguida por el sector de minerales no metálicos, la metalmecánica, químicos y alimentos y bebidas.