La Secretaría de Comercio, a cargo de Guillermo Moreno, envió ayer inspectores a una docena de empresas de medicina prepaga para chequear si se estaba produciendo aumento de cuotas en el sector. Así lo informaron fuentes oficiales, quienes precisaron que la intención es desalentar posibles incrementos del precio de los servicios que prestan este tipo de empresas, a casi dos millones de habitantes. Incluso, desde el Gobierno dejaron trascender también que una empresa prepaga fue intimada a dar marcha atrás con un incremento del 10 por ciento comunicado a sus afiliados. Al Gobierno le preocupa el impacto que un incremento de los valores de la salud privada podría tener sobre el índice de precios al consumidor en los próximos meses.

Entidades de defensa de los consumidores denunciaron que el Hospital Italiano había anunciado a sus clientes que aplicaría un incremento del 10 por ciento de sus cuotas, al tiempo que indicaron que en otras empresas se preparaban medidas en el mismo sentido. Como es sabido, las prepagas deben informar a sus clientes de cualquier aumento con 60 días de antelación. El último ajuste que aplicaron fue en enero, cuanto en general todas incrementaron los valores de sus planes en alrededor de un 10 por ciento.

“La gente nos está informando que el Hospital Italiano envió cartas en las que anuncia un nuevo incremento de las cuotas. Cuando empieza una prepaga a subir los precios, lo hacen todas”, dijo Sandra González, de Adecua. La titular de la entidad también denunció que las empresas comenzaron a cobrar sumas adicionales por cada atención en concepto de coseguro, lo cual calificó de “aumento encubierto”.

Por otro lado, el superintendente de Servicios de Salud, Héctor Capaccioli, afirmó que “el Gobierno no va a autorizar aumentos” y que buscará un entendimiento con las empresas del sector. “Nuestra intención es buscar un acuerdo de precios, pero eso implica tener reglas claras. Hay más de 3000 empresas lo que hace imprescindible además tener una ley que fije un marco regulatorio”, aseguró.