El secretario de Agricultura, Miguel Campos, recibió ayer por la tarde a las entidades rurales para intentar descomprimir la tensión que se generó luego de las nuevas medidas que aplicó el Gobierno para controlar los precios de la carne, el trigo y el maíz. Al analizar la situación del trigo, se informó que próximamente se exigirá que por cada tonelada exportada se garantice media para el mercado interno, al tiempo que se les prometió a los productores que el precio de referencia subirá de 120 a 140 dólares. En el caso del maíz, se confirmó el cierre del registro, pero se garantizó que será “transitorio”. La mayor novedad surgió cuando se analizó el mercado de la carne, pues el secretario les pidió a las entidades que lleven una posición común a la reunión de la Comisión de Seguimiento de precios que se realizará hoy porque “los exportadores están queriendo forzar un escenario similar al que se gestó antes del cierre de las exportaciones”.

Campos convocó a la reunión de urgencia ayer por la mañana y solicitó especialmente la presencia de los presidentes de todas las cámaras, pero sólo asistieron dirigentes de segunda línea. Luciano Miguens y Hugo Biolcatti, presidente y vice de la Sociedad Rural, justificaron su ausencia por una reunión que tenían en Córdoba con delegados zonales y en su reemplazo enviaron a Daniel Pellegrini, director de la entidad. Fernando Gioino, presidente de Coninagro, se quedó cosechando en su campo de Córdoba y envió al asesor económico, Daniel Assef. De Confederaciones Rurales Argentinas sólo se acercó el gerente Carlos Etchepare. Mientras que Eduardo Buzzi y Pablo Orsolini, presidente y vice de la Federación Agraria, se quedaron en Rosario y enviaron a Silvio Corti, responsable de FAA en Buenos Aires.

Los dirigentes argumentaron que no podían llegar a las 16 horas a la Capital para una reunión que había sido convocada a las 11, pero lo cierto es que la mala relación que tiene el secretario con la mayoría de las entidades fue la causa principal de las ausencias, sobre todo si se toma en cuenta que los empresarios desconocían para qué se los estaba convocando.

Pese al faltazo, Campos informó algunas formalidades sobre el cierre de los registros para exportar maíz y prometió que el precio de referencia que está rigiendo de hecho para las ventas de trigo se elevará de 120 a 140 dólares, para achicar la brecha con la cotización internacional, cercana a 190, siempre que se garantice el abastecimiento interno.

Sobre el final de la reunión, mencionó la necesidad de que las entidades concurran con una posición común a la reunión de la Comisión de Seguimiento del precio de la carne, que hoy presidirá el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Fuentes que estuvieron presentes en la reunión aseguraron a Página/12 que Campos les advirtió que los exportadores están forzando un cierre del mercado, pues se beneficiarían con la caída de los precios, teniendo la ventaja de poder guardar la carne en las cámaras hasta que se reabran las exportaciones, tal como ocurrió a comienzos de año.