@“La caída de cuatro bancos en lo que va de la crisis plantea la necesidad de una solución urgente ante la amenaza de una reestructuración desordenada y caótica con el riesgo que esto implica en términos de una generalización de la crisis a todo el sistema”, sostiene la Fundación Capital en su último informe. Y agrega: “El proceso implicará capitalizar a los bancos buenos e intervenir a los no viables”.
Para tal fin, la FC propone crear un organismo independiente del Banco Central y del Ministerio de Economía para auditar la salud de las entidades y diferenciar entre instituciones “viables y no viables”. De hecho, esta misma “sugerencia” le hizo el Fondo Monetario a Roberto Lavagna, mediante un memo secreto que Página/12 reveló días atrás. En la jerga del FMI, ese organismo independiente se llama “unidad de reestructuración bancaria” y serviría para administrar los bancos que fueran suspendidos porque sobrepasaron el límite de redescuentos que pueden recibir del Banco Central y sus accionistas ya no están dispuestos a capitalizarlos.
“El tamaño del sistema financiero es reflejo de la dimensión de la economía en su conjunto. El achicamiento de la economía real a partir de cuatro años de recesión y de la profundización de la crisis y la pérdida de confianza en el sistema financiero impone un sector bancario mucho más reducido”, asegura, en tono pragmático, la FC.
“La inexistencia de una solución alternativa al canje de bonos por depósitos plantea con carácter urgente una estrategia para reestructurar el sistema financiero. Es un tema prioritario que el calendario electoral no puede dejar en segundo plano”, concluye el informe. En otros términos, una de las “soluciones” que plantea el FMI para limitar la emisión monetaria es limitar los redescuentos y cerrar bancos.