ECONOMíA
› EL GRUPO COMAFI SE HARA CARGO DEL SCOTIABANK
El rescate de un náufrago
Los responsables del abandonado Scotiabank llegaron a un acuerdo para que el Grupo Comafi se haga cargo de lo que queda de la entidad canadiense en la Argentina. Aunque seguramente no habrá intercambio de dinero real sino una cobertura de la retirada de los canadienses, fuentes de la City dijeron que la transacción involucrará alrededor de 275 millones de dólares. La operación está siendo analizada por el Banco Central, pero se descuenta que no sufrirá demoras, ya que es una buena noticia para todos los involucrados. Para el Banco Central porque se evita la liquidación del Scotia, para los canadienses porque se pueden ir tranquilos y para el Comafi porque consigue hacer pie en la banca minorista a bajísimo costo. La buena señal también es para el “mercado”, pues demuestra que a pesar de la crisis, todavía hay interesados en expandirse en el sector financiero.
Según informaron fuentes del grupo adquirente, la situación con el personal y las sucursales estaría resuelta. Esto es, conversada con los involucrados. Por ahora, el Scotiabank continúa suspendido y sus empleados, alrededor de 1700 antes de la crisis, sin mayor ocupación y, hasta la reciente oferta, con la perspectiva cierta de una potencial pérdida de la fuente laboral.
El Grupo Comafi, comandado por Guillermo Cerviño, además de controlar el Banco Comafi, una entidad de segundo piso (mayorista), es a través de Banco del Tucumán el principal agente financiero de la economía de la provincia norteña, donde cuenta con 24 sucursales. El Scotiabank cuenta con 92 sucursales en todo el país, de las cuales 71 se concentran en Capital Federal y la provincia de Buenos Aires. Esta red le otorgará al grupo adquirente una fuerte inserción en la banca minorista, la que será clave en el desarrollo de la nueva banca transaccional. Más aún si se considera, como dijeron a este diario fuentes de la City, que el costo final que se terminará pagando será muy bajo. Entre los interesados por el Scotia se encontraba también el Banco Hipotecario, pero al parecer el Comafi se decidió antes.
En cuanto a la situación de los pasivos del Scotiabank, cabe recordar que sus ahorristas fueron los que mayor participación tuvieron en el canje de depósitos por bonos, por lo que el grueso de las obligaciones pasaron a ser responsabilidad última del Estado. En el plano internacional, el Grupo Comafi posee vinculaciones con capitales italianos. Una de sus participaciones es en el Banco de Nápoles.
La autoridad monetaria, en tanto, se limitó a informar que la oferta del Grupo Comafi estaba “en consideración”. De acuerdo a los pasos burocráticos, tras el análisis de la oferta por la autoridad monetaria, se debe convocar al resto de las entidades del sistema para que la mejoren. Si efectivamente la oferta es mejorada, la autoridad monetaria le dará una nueva oportunidad para que el Comafi aumente la postura de la otra entidad interesada. El monto de la adquisición sería aportado por el Grupo Comafi, por Sedesa y por el Fondo Fiduciario de Capitalización Bancaria.
Pero al margen de los trámites, la noticia fue considerada por el mercado como “una señal de confianza”, pues tras la huida de algunos actores, como los canadienses y los franceses del Credit Agricole, y la menos creíble amenaza de otros, el sector financiero argentino todavía puede ser fuente de buenos negocios.