“Acá no hay previstos ni cortes domiciliarios de energía ni aumentos de tarifas, en esta instancia y en este tiempo.” El presidente de la Nación buscó ayer ponerles límites a las alternativas de medidas a las que se recurriría en la emergencia, para afrontar la escasez de recursos energéticos que afectará este invierno y, probablemente, los próximos. “Vamos a seguir estando, seguramente durante muchos años, al límite de nuestra producción (de energía); pero la Argentina a oscuras que quieren ver, la Argentina paralizada que quieren ver, porque no tienen una sola idea, no la van a ver”, dijo Néstor Kirchner respondiendo a una oposición que supuestamente querría esmerilar al Gobierno y verlo fracasar en esta etapa.

Durante el acto de firma de convenios con municipios de la provincia de Chubut por obras de infraestructura, Kirchner se apartó del eje de la reunión para responder a versiones periodísticas publicadas en los matutinos, hábito que había abandonado en el último año. La crisis energética y, seguramente, el clima electoral instalado desde la confirmación de la candidatura de Cristina Kirchner para las presidenciales parecen haberlo motivado para volver con esa fórmula.

“Salvo que algún matutino esté más informado que yo –ironizó–, acá no hay previstos cortes domiciliarios de energía, ni aumentos de tarifas, en esta instancia y este tiempo.” Kirchner les apuntó a los grupos de presión, los denominados lobbies, que actúan en favor de los intereses empresarios. “Hay un lobby que hacen las empresas del sector con respecto al tema tarifario, para decir que es necesario subir la tarifa para que haya más gas”, a las que les respondió “produzcan, inviertan, cumplan con los compromisos que tienen e iremos valorizando los temas que correspondan. Hoy no hay por qué subir las tarifas”.

El presidente de la Nación también hizo referencia a la versión periodística que le adjudica a la Secretaría de Energía, y a su titular, Daniel Cameron, defender supuestamente un aumento de tarifa a los hogares de más alto consumo. “Son lobbies impulsados por las empresas, esos lobbies que aparecen a veces en los diarios, diciendo que la Secretaría de Energía dijo... la Secretaría de Energía no dijo nada, y con absoluta claridad son empresas que quieren aprovechar el crecimiento, tienen mayor demanda de energía y tratan de sacar más rédito a las pocas inversiones que hacen, (cuando) tendrían que hacer muchas más para cumplir.”

Tras repasar con una catarata de números las inversiones del Estado en el área energética, Kirchner volvió a destacar la relación entre crecimiento y consumo energético como un elemento positivo más allá de las dificultades que genere. “Leí por ahí que un cronista decía que la Argentina se transformó de exportador en importador de energía. Yo me pregunto: ¿queremos que el país crezca, queremos que haya trabajo, que las industrias se desarrollen, queremos batir la pobreza, la indigencia? (...) Si nosotros consumimos todo lo que producimos y estamos importando como lo estamos haciendo, significa que la Argentina está creciendo a un ritmo muy importante. Tenemos que seguir invirtiendo, en tratar de producir lo que tenemos, pero no vamos a parar el país por no importar.”

Finalmente, el Presidente previó que “vamos a seguir durante muchos años al límite de nuestra producción” de energía, “pero la Argentina a oscuras que quieren ver, la Argentina paralizada, no la van a ver”.

Por otra parte, la Secretaría de Comercio Interior intervino en el mercado eléctrico a través de un operativo de inspecciones en las centrales térmicas. La hipótesis que maneja esa repartición, de que las centrales pudieran estar operando por debajo de su capacidad, intenta ser corroborada a través del pedido de información técnica y relevamiento de instalaciones.

“Estarían generando por debajo de sus posibilidades, de acuerdo con la capacidad instalada”, señaló una fuente oficial a la agencia Télam, sugiriendo que la causa de la pérdida de generación estaría vinculada con que las empresas concesionarias “no habrían efectuado en los últimos años el mantenimiento técnico correspondiente”.

La mayor parte de los datos que estaría reclamando Comercio Interior está disponible en Cammesa, la compañía administradora del mercado eléctrico mayorista que coordina la Secretaría de Energía. Un dato adicional que estaría limitando la capacidad de generación de las centrales térmicas, que encontrarán los inspectores de Guillermo Moreno al realizar las inspecciones, es que al estar funcionando a gasoil o fueloil, las usinas no funcionan con el mismo nivel de eficiencia que cuando lo hacen alimentadas a gas. “La pérdida de generación es de aproximadamente un 15 por ciento en promedio”, estimó un especialista consultado por este diario.

Para garantizar el consumo de gas en los hogares y en las estaciones de GNC, el suministro de gas a las centrales térmicas se encuentra interrumpido desde hace ya varias semanas. Ayer, las distribuidoras de gas informaron que la provisión a la industria con contratos “en firme” se mantenía en condiciones normales. No así el suministro eléctrico, que mantiene las restricciones de uso entre las 16 y las 24 horas a los niveles registrados en el año 2005.

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