ECONOMíA › PROPUESTA DE COMERCIANTES CHINOS Y CONSUMIDORES
El tomate se convirtió en el enemigo número uno de varias asociaciones de comerciantes y de ligas defensoras de los derechos de los consumidores. Con el kilo de la hortaliza expendiéndose entre 12 y 15 pesos, la cámara que agrupa a los supermercados de origen chino anunció que en los locales de Capital y el Gran Buenos Aires no se venderán tomates. Y varias asociaciones de consumidores convocaron a un boicot total.
Las ventas de tomates en los autoservicios chinos cayó en picada tras el súbito aumento en el precio. Miguel Angel Calvete, gerente de la cámara, dijo a Página/12 que se vende la cuarta parte de lo que se venía colocando hasta antes del último ajuste. De acuerdo con los datos que manejan en la cámara, mientras los productores de tomates perciben entre 60 y 80 pesos por cajón de 18 kilos, a los minoristas llega a 180 pesos, tres veces más caro. Según los comerciantes, además de las causas climáticas que impulsaron los precios, existe un aprovechamiento de la cadena comercial.
La resistencia de los súper de origen chino no se limitará al tomate. Ayer se reunió la comisión de precios de la cámara y decidió que la próxima semana se bloquearán las compras de zapallo anco, a menos que el producto baje de precio. El kilo se está vendiendo entre 6 y 7 pesos. Cada bolsa de 15 kilos está llegando al minorista a 80 pesos, contra 45 que costaba hasta la semana pasada. Calvete señaló a este diario que la medida tiene la adhesión de unos 620 locales de Capital y el GBA. Los comercios de algunas zonas, como Lugano, Mataderos y otras del Gran Buenos Aires, ya habían decidido dejar de expender tomates y zapallos en las últimas jornadas, cuando todavía no había una determinación orgánica de la cámara. “Queremos ser solidarios con nuestra clientela”, afirmaron los miembros de la cámara en un comunicado.
Por su parte, otras cámaras comerciales y entidades defensoras de los consumidores pondrán en marcha distintas campañas para expresar su repudio a la fuerte suba de algunos alimentos. Pasado mañana se iniciará una campaña de educación al consumidor para que no compre tomate a los valores actuales. El boicot tendrá vigencia hasta el viernes 12. El encuentro del lunes se llevará a cabo en la esquina de Carlos Calvo y Bolívar (Mercado de San Telmo) a las nueve de la mañana y fue convocado por el Centro de Educación al Consumidor, Deuco, Adduc, ACIJ y Fedecámaras.
Las medidas de comerciantes y consumidores se suman a la que ya habían iniciado algunos restaurantes porteños, que en las últimas horas decidieron dejar de ofrecer platos que contengan los productos que más subieron: tomate, papa y zapallo anco.
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