El director gerente del Fondo Monetario Internacional, el español Rodrigo Rato, volvió a sugerir que Argentina promueva un “aterrizaje suave” de su economía y cuestionó el combate de la inflación por la vía de la intervención del Estado. De ese modo, el funcionario saliente insistió con una propuesta formulada días atrás y que inspiró la crítica del ministro de Economía local, Miguel Peirano, quien reprochó al organismo multilateral insistir con recetas ya probadas y fallidas.

Rato, que el 1º de noviembre será reemplazado por el francés Dominique Strauss-Kahn, formuló sus declaraciones a poco de que comience en Washington la Asamblea Anual conjunta del FMI y el Banco Mundial, que se extenderá hasta el lunes y donde el foco está puesto en qué sucederá con la economía mundial tras la crisis financiera de los últimos meses y ante el creciente precio del petróleo.

“Vemos que en la Argentina la economía continúa expandiéndose rápidamente y el desempleo y la pobreza caen por debajo de los niveles precrisis, pero las presiones sobre los precios se incrementan y el superávit externo declina”, advirtió Rato en una conferencia de prensa multitudinaria, a la que asistieron medios de todos los países.

El titular del FMI también destacó como un problema el hecho de que “las presiones inflacionarias están siendo controladas a través de una creciente intervención” y reiteró la visión fondomonetarista de que “el gobierno argentino debería utilizar todos los instrumentos macroeconómicos a su disposición, esto es políticas fiscales, monetarias y cambiarias, para permitir un aterrizaje suave con un crecimiento sostenible y baja inflación”.

“Es parte de la receta que años pasados llevó al estancamiento de nuestra economía”, fue la réplica que se había escuchado poco antes desde Buenos Aires en boca de Peirano. Ajeno a esa reacción, Rato reiteró horas después su visión sobre la situación económica argentina y opinó que la discusión con las autoridades electas sobre el “artículo IV” –el que dispone los monitoreos anuales de los países miembros– permitirá “intercambiar opiniones directamente con los argentinos”.

Rato también advirtió que la economía mundial podría crecer menos el año próximo, en parte como consecuencia de los cimbronazos financieros que se registraron tras la crisis de las hipotecas de los Estados Unidos y en parte por la suba en los precios del petróleo. En este sentido, pronosticó que el carburante seguirá aumentando, pero estabilizándose el año próximo en los 77 dólares el barril, por debajo de las cotizaciones de las últimas semanas.