Como corresponde a todo dirigente opositor que se precie, Elisa Carrió estuvo ayer en la nueva meca de la Argentina agroexportadora: Expoagro, la mayor exposición de la producción agropecuaria a cielo abierto, un emprendimiento creado por los diarios Clarín y La Nación. “El único camino de salida de la crisis que tiene la Argentina es el campo y la agroindustria. Estamos siendo extorsionados y acosados por un gobierno que impide la única salida”, dijo Carrió.

La fundadora de la Coalición Cívica anunció que la oposición convocará a sesiones especiales en el Congreso para intentar forzar la discusión de las retenciones a la soja. “Antes o después vamos a conseguir quórum”, se jactó. En la conferencia de prensa, Carrió adelantó algunas de las medidas que propondrá en el Congreso. “Hay que bajar los costos laborales para sostener el empleo”, exhortó.

La presencia de Carrió en el predio de Expoagro en la localidad santafesina de Theobald, a 60 kilómetros de Rosario, sumó un nuevo capítulo al hiperpromocionado desfile de figuras opositoras que comenzó el viernes con la asistencia del gobernador Hermes Binner, el vicepresidente Julio Cobos, el jefe de Gobierno Mauricio Macri y los diputados Francisco de Narváez y Felipe Solá. Ayer, Carrió estuvo acompañada por la candidata a diputada por la provincia de Buenos Aires Margarita Stolbizer, el ex ministro de Economía Ricardo López Murphy y el diputado Adrián Pérez, jefe del bloque de Coalición Cívica. En su contacto con la prensa, Carrió ratificó su “compromiso absoluto” con las demandas de la Mesa de Enlace y criticó al Gobierno por su política ante el sector rural. “Desconoce la crisis financiera internacional y la que aqueja al interior”, cargó.

A la hora de las propuestas, Carrió enumeró las medidas que ella implementaría en este momento y que permitirían, según su visión, generar “un shock de confianza”. Propuso reducir las retenciones a la soja, eliminar las que se cobran al trigo y realizar una “reforma profunda” de la Oncca. También habló de reducir los costos de emplear trabajadores, un tópico clásico del pensamiento neoliberal. Su propuesta de convocar a sesiones especiales para impulsar esas medidas a través de una ley también fue defendida por el diputado Pérez. Para abrir el debate en la Cámara, la oposición debe alcanzar un mínimo de 129 diputados, el famoso quórum. “Faltan algunos”, reconoció Perez. Enseguida dijo que tenía confianza en que iban a lograr ese número. La misma confianza había exhibido Solá durante su recorrida por la feria. El viernes, en su visita a Expoagro, el ex gobernador dijo que era posible que la oposición “forzara un cambio en algunos diputados” del oficialismo. “Tienen que volver al Interior y no han votado con muchas ganas el año pasado”, chicaneó.

Desde el oficialismo salió a contestar el diputado Alberto Cantero, presidente de la Comisión de Agricultura. “La oposición política no debe tratar de arrinconar a la dirigencia agropecuaria a que se discuta un solo tema. La problemática es global para todo el país y hay que ir paso a paso”, exhortó.