Los precios de los bienes que integran la Canasta Básica Alimentaria (CBA) subieron 0,6 por ciento en abril, marcando una desaceleración con respecto al primer trimestre, período en el cual los incrementos mensuales oscilaron entre 2,1 y 4,7 por ciento. De este modo, un hombre adulto requiere en la actualidad 172 pesos para no caer en la indigencia y una familia tipo de cuatro miembros, 531,6 pesos. En el caso de la Canasta Básica Total (CBT), que además de alimentos incorpora indumentaria y gastos de transporte, la suba fue de 0,2 por ciento, también menor a la que se venía registrando en lo que va del año. Esta último indicador establece el umbral mínimo para no caer en la pobreza y ahora tiene un costo de 372,3 pesos para un adulto y de 1150,5 pesos para una familia tipo.

La CBA se determina en función de los hábitos de consumo de la población. Para calcularla se toman en cuenta los requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos imprescindibles para que un hombre adulto, de entre 30 y 59 años, de actividad moderada, cubra sus necesidades básicas alimentarias. A su vez, para determinar la CBT se consideran bienes y también servicios no alimentarios. Ambas canastas se valorizan mes a mes con las variaciones de precios relevadas por el Indec para la elaboración del índice de precios al consumidor.

En lo que va del año, la CBA aumentó 10,3 por ciento y la CBT 6,8 por ciento. Si se toma en cuenta la variación acumulada a lo largo de los últimos doce meses, esos porcentajes trepan a 19,6 y 14,9 por ciento, respectivamente. Para las clases populares que durante el último año obtuvieron un aumento salarial cercano al 20 por ciento, la suba que registró la Canasta Básica neutralizó ese incremento, porque las familias de menores recursos destinan la gran mayoría de su ingreso a la compra de alimentos. Ahora bien, si el incremento salarial fue menor, la consecuencia es una pérdida de poder adquisitivo. Por eso, es alentador que la suba se haya desacelerado, ya que, si se proyectaban los niveles del primer trimestre, el incremento anual esperado en la CBA era de 36 por ciento y ahora ese dato bajó al 30,9 por ciento.