El titular de la Pastoral Social, monseñor Jorge Casaretto, señaló que “éste no es el mejor momento para discutir la distribución de ganancias entre los trabajadores”. “No sé si ésta es la medida que necesita la Argentina, dado el grado de exclusión social. Si esto va a significar nada más que un beneficio para personas que están en blanco y no toman en cuenta a aquellos que están en negro, hay que pensarlo bien”, cuestionó el prelado. De esta manera, Casaretto se metió en la puja entre la CGT y los distintos sectores empresarios que se oponen al proyecto de ley. “Esta discusión debe ser parte de un objetivo más amplio que excede el ámbito sindical y empresarial, para tener una mirada sobre la situación general de pobreza y exclusión social de la Argentina”, agregó Casaretto. Más allá de estos reparos, el funcionario eclesiástico no dijo si está a favor o en contra de la iniciativa, que recién comenzará su tratamiento en la Cámara de Diputados en dos semanas. Si bien el debate debía haberse iniciado anteayer, la UIA y demás cámaras patronales faltaron a la cita y pidieron más tiempo para estudiar el tema.