El próximo martes se llevará a cabo en la ciudad de Córdoba el foro de la industria automotriz, con el objetivo de analizar la potencialidad de crecimiento de la actividad y sus problemas estructurales. Se trata de la segunda reunión sectorial en el marco del Plan Estratégico Industrial 2020. El déficit de autopartes será el eje central del encuentro, ya que el año pasado el sector arrojó un déficit comercial de 6000 millones de dólares. De todos modos, cinco automotrices ya acordaron con el Gobierno un plan para reducir sus respectivos desequilibrios. Esta semana acercaron sus carpetas PSA Peugeot-Citroën y Alfa Romeo, que se sumaron a las que ya fueron aprobadas: Volkswagen, Mercedes Benz y Porsche.

El plan industrial se desarrollará sobre diez sectores estratégicos. El foro anterior había sido con el sector calzado y marroquinero, en el cual participó toda la cadena de valor. Lo mismo se buscará la semana próxima. Según adelantó la ministra de Industria, Débora Giorgi, en el encuentro del martes se debatirá la integración local de la industria automotriz, el equilibrio de la balanza comercial y el desarrollo tecnológico. El foro reunirá representantes de las terminales, autopartistas, funcionarios, sindicatos y académicos. En Córdoba se encuentran radicadas FIAT Auto, Renault, Iveco y Volkswagen, representando el 27 por ciento de la producción nacional de vehículos.

Más allá del temario, la principal preocupación del Gobierno es reducir el déficit del sector. La producción de todas las terminales se expandió el año pasado, con algunas empresas que actualmente anunciaron la incorporación de nuevos turnos. Pero este crecimiento amplió todavía más el déficit del sector, dado que la mayoría de las partes que se ensamblan en el país son importadas. El sector evidenció el año pasado un rojo de 6800 millones de dólares en autopartes y un superávit de 1018 millones en vehículos, según la consultora Abeceb.com

Para achicar esa diferencia, además de los foros, la cartera de Industria y la Secretaría de Comercio rubricaron una serie de acuerdos con las automotrices antes citadas. Con estos programas –en su mayoría son a dos años– el Gobierno prevé reducir en un 35 por ciento el desequilibrio en la balanza del sector.