El secretario general de la CGT, Hugo Moyano, denunció a las empresas de medicina prepaga de no operar en un pie de igualdad con las obras sociales. “Tienen una ventaja muy grande, en la letra chica de inscripción o adhesión no dicen todo; la gente se adhiere y, cuando se quiere acordar, le sale más caro que cualquier otra forma (de atención, porque) no le prestan la asistencia que corresponde”.

El dirigente de Camioneros hizo mención al proyecto de regulación para las prepagas cuya discusión se retomó en el Congreso tras varios años de congelamiento. “Están tratando el tema, tratar de regular el sistema de funcionamiento de las prepagas, que corren con mucha ventaja; hay una cantidad de situaciones que hacen que no atiendan o no se hagan cargo, por ejemplo con las enfermedades preexistentes”, puntualizó.

Si el nuevo régimen se convierte en ley, las empresas no podrán fijar períodos de carencia o espera para las prestaciones, no podrán tomar la edad como criterio de rechazo de admisión ni ajustar el valor de la cuota en función de la edad.