ECONOMíA • SUBNOTA › DETALLES SOBRE LAS PLANTAS NUCLEARES QUE SE VIENEN
› Por Fernando Krakowiak
Desde San Petersburgo
Luego de exponer sobre los avances del Plan Nuclear, el ministro de Planificación, Julio De Vido, pasó por la sala de prensa para conversar con los periodistas sobre las nuevas centrales que el Gobierno planea construir.
–¿Por qué proyectan dos centrales nucleares con tecnologías diferentes?
–Hacer una cuarta central nuclear con uranio natural y agua pesada nos va a permitir utilizar en plenitud la planta de agua pesada de Arroyito, que si no quedaría con un excedente de producción. Además, vamos a poder disponer del conocimiento adquirido por las empresas argentinas en estos últimos años. Va a ser prácticamente una gemela de Atucha II con tecnología de base canadiense y un aporte nacional importante, porque ya estamos en condiciones de llevar adelante más del 75 por ciento de la obra con tecnología propia. La de uranio enriquecido, en cambio, requerirá la intervención de tecnología importada.
–¿No es un retroceso hacer una central de uranio natural cuando se está avanzando hacia las centrales de uranio enriquecido?
–No, porque tenemos la tecnología para hacerla y debemos cerrar el ciclo, ya que la planta de Arroyito en Neuquén está preparada para dos centrales. Estamos cerrando una etapa y paralelamente abriendo otra para ganar tiempo.
–¿Qué ventajas va a tener comenzar a construir centrales de uranio enriquecido?
–Las unidades de generación son un 50 por ciento más potentes y permiten una mayor continuidad, de hasta 18 meses.
–¿Qué montos de inversión requieren ambas centrales?
–Unos 5000 millones de dólares por reactor para la central de uranio enriquecido y unos 3000 millones de dólares por reactor para la central de uranio natural. Igual hay que tener en cuenta que supone un ahorro de energía muy importante. Atucha II, por ejemplo, permitirá ahorrar 1500 millones de dólares por año que hoy se destinan a la compra de gasoil en invierno.
–¿Van a ser dos reactores por central?
–Es una posibilidad que estamos evaluando.
–¿La empresa interesada en construir la central de uranio enriquecido tiene que estar dispuesta a financiar la totalidad de la obra?
–Estamos muy entusiasmados por lo que pasó con las represas del río Santa Cruz. Una de las empresas chinas que se presentó a la licitación ofreció un financiamiento del 120 por ciento, porque incluye el financiamiento del IVA, y la otra un 100 por ciento. Estimamos que en el caso de una central nuclear vamos a tener ofertas financieras de la misma calidad de las que tuvimos con las represas. Por ahora lo único que hicieron es presentar sus antecedentes para detallar la tecnología que utilizarían.
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