Eliminar los controles cambiarios. Liberar la cotización del tipo de cambio a la oferta y demanda del mercado. Bajar retenciones al campo. Estos fueron algunos de los principales puntos que prometió Mauricio Macri, candidato presidencial de Cambiemos, ante distintos hombres de negocio de la cúpula empresarial argentina. Economistas no convencionales aseguraron a Página/12 que estas iniciativas asociadas con las políticas del neoliberalismo generarían fuertes tensiones en materia de actividad económica, con retroceso del empleo y distribución regresiva de los ingresos. Indicaron que la propuesta del próximo gobierno no puede ser transferir riquezas desde los sectores del trabajo con entradas fijas hacia grupos exportadores y financieros. Aseguraron que la estrategia, para que sea sustentable, tiene que avanzar en fomentar el mercado interno y apostar por actividades estratégicas vinculadas a infraestructura y energía.

“Lo que plantea Macri es un conjunto de medidas redistributivas a favor del campo y de los exportadores. Desde el punto de vista productivo reafirma las tendencias hacia la sojización y al monocultivo, en detrimento de los sectores manufactureros que producen para abastecer la demanda local”, indicó Ricardo Aronskind, economista del Plan Fénix. Agregó que la propuesta del dirigente del PRO implicaría el peor de los mundos. “El consumo interno experimentaría una contracción debido a la caída del salario real por la devaluación, mientras que no queda claro que las exportaciones vayan a subir por una corrección del dólar. Para que los despachos comerciales aumenten tiene que haber un mundo que demande mercaderías. Con la desaceleración comercial global que se observa en la actualidad, no hay tipo de cambio que convenza a otros países de comprar más productos argentinos”, indicó.

Aronskind aseguró además que las propuestas de Macri tendrían un fuerte impacto para el proceso inflacionario. “El resultado de las medidas neoliberales que propone el partido de Macri incrementarán la puja distributiva en un contexto desfavorable para los trabajadores y los segmentos vulnerables de la población, lo que generará dificultades para las industrias que venden para el mercado interno”, resaltó.

El director del CESO, Andrés Asiain, mencionó que la propuesta de “abrir el cepo” es una promesa de Macri a la cúpula empresaria respecto de que permitirá girar utilidades por alrededor de 8000 millones de dólares que no se autorizaron desde 2012. “Sostener la promesa respecto del giro de dividendos sólo puede hacerse de dos maneras. Una es a través de un ajuste recesivo para bajar importaciones y liberar dólares. La otra es la vuelta al endeudamiento para financiar la fuga de divisas”, planteó. Asian indicó que el camino del ajuste recesivo implicaría para la economía una contracción de alrededor de 4 por ciento del PBI y del 12 por ciento de las importaciones. La estrategia de volver a los mercados internacionales, en tanto, implicaría tomar nueva deuda por más de 30 mil millones de dólares. “Sería el regreso al círculo vicioso del endeudamiento de los ’90, con condicionamientos de organismos internacionales de crédito”, dijo.

En la estrategia de políticas neoliberales propuestas por Macri, agregó el director del CESO, el financiamiento con el exterior no se piensa para solucionar problemas estructurales de la matriz productiva local, sino que se buscan conseguir recursos para financiar la fuga de capitales de los empresarios locales.

Arnaldo Bocco, mientras tanto, aseguró que las propuestas de Macri no son viables. “Los planteos son electoralistas pero no se pueden llevar adelante. Liberar los controles cambiarios y el tipo de cambio generaría a una fuerte dolarización de las carteras de los individuos, atentando contra la estabilidad cambiaria y de la propia economía”, aseguró. Indicó que las medidas generarían tensiones para la producción. “Si la prioridad de la política económica es para el ahorrista en dólares y no para la empresa que necesita importar insumos para producir, va a haber restricción productiva y fuerte consecuencia en materia de empleo”, planteó.