Con la premisa de que la solución de fondo al problema de la inflación es el aumento de la inversión, el Ministerio de Economía anunció una batería de acciones para promoverlas. La más original es el subsidio de tasas de interés para créditos destinados al recambio de taxis, lo que podrá ser aprovechado tanto por empresas como por particulares. Otra medida innovadora, de carácter general, es la concesión de financiamiento público a las pymes mediante la compra de títulos de deuda emitidos por ellas. Se trata de Obligaciones Negociables, que las empresas lanzarán al mercado y que serán suscriptas hasta en un 80 por ciento por el Gobierno.
Roberto Lavagna se encargó personalmente de los anuncios, junto al secretario de Industria, Miguel Peirano, y el subsecretario Pymes, Federico Poli. El ministro indicó que el objetivo de la compra de ON es tanto aportar financiamiento a las pymes como acercar a esas empresas a la Bolsa de Comercio. De hecho, el 20 por ciento de las emisiones, como piso, deberán ser compradas por inversores privados. Para las pymes tiene un atractivo especial, porque la tasa que cobrará el Estado será del 9,75 por ciento anual, inferior a la inflación.
“El Estado será el comprador de última instancia” de los títulos, señaló Lavagna. Eso será durante algún tiempo, hasta que los inversores muestren interés por los papeles de deuda de las pymes. Un anzuelo para atraerlos es que tendrán garantía doble, de una Sociedad de Garantía Recíproca y del Fogapyme, que es otro fondo de garantía estatal. Las pymes podrán emitir ON desde 500 mil pesos y hasta 1,2 millón de pesos para capital de trabajo y hasta 3 millones para proyectos de inversión. En el primer caso serán rescatadas en un plazo de 30 meses, con un año de gracia, y en el segundo en un lapso de 36 a 48 meses, en las mismas condiciones.
La segunda medida que anunció Lavagna fueron nuevas líneas de bonificación de tasas de interés para préstamos con distintos fines. Una línea de 10 millones será para créditos prendarios para el recambio de taxis. Los bancos que quieran ofrecer estos préstamos deberán participar en una licitación que se hará en la segunda semana de noviembre. La condición para los taxistas será comprar vehículos fabricados en el país. El subsidio será en una primera etapa para los taxistas de Capital Federal, que recibirán un descuento en las tasas de los préstamos del 25 por ciento.
También habrá tasas subsidiadas para la industria de la madera (con una línea de 25 millones de pesos), la industria editorial (15 millones), los ómnibus de pasajeros (25 millones) y el turismo (25 millones). Finalmente, Peirano indicó que se prepara el quinto llamado para proyectos de inversión que aspiren a descuentos impositivos a través del sistema de amortización acelerada de Ganancias y devolución anticipada del IVA.