En Mar del Plata, donde está actuando en el teatro de revista, Nito Artaza hizo un alto en los ensayos. Descorchó un champán y brindó junto a un grupo de ahorristas por el fallo de la Corte Suprema. En 2001, cuando un concierto de cacerolas lo sorprendió en La Feliz, Artaza se sumó a los que protestaban contra el corralito, que atrapó varios miles de dólares del capocómico. Pronto se convirtió en la cara visible de los ahorristas. Ayer estaba exultante. “Es el fin de una incertidumbre. El tiempo resolvió la cuestión. Y la Corte la disolvió. Espero que podamos vivir una Argentina más normal”, dijo a Página/12, inmerso en el festejo.

–¿Cómo evalúa el fallo?

–Yo me siento orgulloso de la gente que nos acompañó todo este tiempo. Es el fin de una pesadilla legal, de la lucha, después de cinco años. Los ahorristas obtuvieron un resarcimiento, pero no nos olvidemos que tuvieron que hacer todo un calvario. No me quiero olvidar de que a los bancos los compensó el Estado por millones de dólares, no pusieron un peso. El resto lo financió la inflación, lo que demuestra el poder de lo banqueros.

–Pero, ¿está conforme o no?

–Sí, y bueno. Los jueces de primera y segunda instancia le dieron la razón a la gente. La Corte no podía ir contra miles de fallos en todo el país. Lo que me preocupa es que si te atrasás con un crédito, te sale en el Veraz. Los bancos estuvieron cinco años protegidos por el Estado por las medidas de Cavallo, de Duhalde después avaladas por Kirchner. ¿Qué pasa si nosotros le hubiéramos debido al banco cinco años? Nos hubieran embargado las casas. En cambio, ellos hicieron lo que quisieron: malversaron fondos y devuelven la plata a cinco años y en pesos. Y con un Poder Ejecutivo que los indemnizó con millones de dólares, si hasta el FMI le pagamos todo en dólares. Los banqueros son los dueños del mundo. Estoy haciendo estudiar a mis hijos para que sean banqueros. Tato Bores tendría que haber hecho un monólogo sobre esto.

–Supongo que usted ya está pensando uno..

–Y... yo lo voy a intentar desde mi teatro. Me preocupa que cinco jueces de la Corte entendieron en 2002 que era constitucional la pesificación. Eso significa que en una emergencia se puede violar los derechos constitucionales. Muchos jueces de esta Corte fueron nombrados por Duhalde y por Kirchner y no quieren decir que eso es inconstitucional. Esta Corte es política y declara la constitucionalidad. Debemos tener una Justicia más independiente. Valoro el fallo, porque es peor no tener nada. Y es bueno que las costas las paguen los bancos.

–¿Está de acuerdo con el monto que fijaron?

–Hace un resarcimiento. Nunca va a ser suficiente cuando a uno le violaron un derecho y la disponibilidad de su ahorro. Lamento por las miles de personas que murieron sin conseguir ejercer sus derechos.

–¿Con ésto acaban las demandas por el corralito?

–No. Hay gente que va a demandar por daños y perjuicios. Y es lógico. No importa que la Corte diga que no se puede demandar. La gente lo va a hacer igual.