La cadena de televisión árabe Al Jazeera difundió ayer una grabación sonora con la foto de soporte de Osama bin Laden que, de comprobarse auténtica, sería una prueba de que el líder fundamentalista está vivo. En la cinta, Osama se congratula de los recientes ataques en la isla de Bali, Kuwait, Karachi, Moscú, Yerbá y Yemen. En su alocución, Bin Laden arremetió contra su enemigo occidental, personificado en el presidente estadounidense George W. Bush, al que llamó el “faraón del siglo” y como “peores asesinos” a sus aliados, entre los que señaló a Gran Bretaña, Francia, Italia, Canadá, Alemania y Australia. La Casa Blanca dijo que está estudiando la veracidad de la cinta.
El mensaje fue su advertencia para el mundo occidental: “Lo ocurrido después de las conquistas de Nueva York y Washington hasta hoy, como por ejemplo las operaciones contra los alemanes en Túnez, los franceses en Karachi, la explosión del petrolero francés en Yemen, la operación contra los marines en Failaka (Kuwait), contra los británicos y los australianos en las explosiones de Bali (Indonesia), así como la reciente toma de rehenes en Moscú, son la respuesta de los musulmanes preocupados por defender su religión y responder a las órdenes de Dios y de su profeta”. Bin laden amenazó con emular la ley del Talión: “De la misma forma que ustedes asesinan, serán asesinados, de la misma forma en que nos bombardean, serán bombardeados”.
En su discurso, el líder terrorista advirtió del riesgo que corren los pueblos que se alían a Estados Unidos. “Lo que hace Bush, el faraón del siglo, asesinando a nuestros niños en Irak, y lo que hace Israel, aliado de Estados Unidos, bombardeando las casas que albergan ancianos, mujeres y niños en Palestina, utilizando aviones norteamericanos, es suficiente para que los sabios que hay entre sus dirigentes se alejen de esta banda criminal.”
Citó el caso de Australia, “que está siendo advertida por haber participado en la guerra en Afganistán y por su contribución a la separación de Timor Oriental. Sin embargo, ha ignorado esta advertencia hasta el día en que escuchó el eco de la explosión de Bali”, refiriéndose el atentado con coche bomba que el 12 de octubre pasado dejó al menos 190 muertos, la mayoría australianos. En esa línea insistió que “cuando ustedes miran sus muertos en Moscú, no olviden los nuestros en Chechenia”. En tono imperativo, la presunta voz del terrorista advirtió que “si ustedes sufren al ver a sus muertos, acuérdense también de nuestros niños muertos en Palestina, Irak o Afganistán”. Y se refirió a su mayor convocatoria, si no propósito existencial: “ha llegado la hora de reestablecer la igualdad”, prometiendo nuevos ataques perpetrados por jóvenes musulmanes “que se han comprometido ante Dios a seguir la Jihad (guerra santa), por medio de la palabra y la espada, para establecer la justicia y erradicar la injusticia hasta que su corazón deje de latir”.