El Partido Comunista chino (PCCh) concluyó ayer sus sesiones secretas para diseñar el cambio generacional de su cúpula, con lo que quedó allanado el camino para que hoy el congreso partidario apruebe al nuevo Comité Central del PCCh. Con este paso, el PCCh protagonizará una inédita apertura para incorporar a empresarios privados y a la nueva élite económica de China que ha impulsado el crecimiento del país en la última década.
La presidencia del congreso del PCCh aprobó ayer la lista del rejuvenecido Comité Central para el período 2002-2007, que es el que a su vez elige el Buró Político, la verdadera fuerza de poder en China. Se espera que los 2114 delegados aprueben la lista, en la que el vicepresidente Hu Jintao figura como próximo presidente del partido. Otros miembros del poderoso Comité Permanente dejarán de pertenecer al Buró Político por razones de edad.
De esta manera comienza el retiro gradual del presidente chino, Jiang Zemin, que cederá la jefatura de Estado a Hu Jintao en marzo del año próximo. Los delegados incorporarán hoy, en una decisión histórica, la teoría de las tres representaciones, propuesta por Jiang, que propone que el Partido Comunista ya no represente únicamente a los trabajadores, campesinos y soldados, sino también a las “fuerzas de producción progresistas”, es decir, a la nueva élite de la economía privada, así como a la “cultura progresista” y la “gran mayoría del pueblo”. China ya es deliberadamente capitalista.