Osama bin Laden, líder de la organización terrorista Al Qaida, habría reivindicado la responsabilidad de su red en el frustrado atentado navideño contra el vuelo 253 de Northwest. En un nuevo mensaje de audio divulgado ayer por la cadena de televisión árabe Al Jazeera, el jefe de Al Qaida habría prometido nuevos ataques a los Estados Unidos mientras siga apoyando a Israel.

“Si hubiera sido posible llevar nuestro mensaje con palabras, no lo hubiéramos hecho con aviones”, habría espetado el jefe terrorista en la primera grabación que se recibe de él desde septiembre de 2009. “El mensaje que habíamos querido transmitir con el intento del héroe Umar Farouk Abdulmutallab confirma los mensajes precedentes transmitidos por los héroes del 11 de septiembre, y que fueron repetidos antes y después de esa fecha: Estados Unidos no podrá aspirar a la seguridad antes que ésta sea una realidad en Palestina. Es injusto que ustedes tengan una vida tranquila mientras nuestros hermanos de Gaza viven en las peores condiciones”, habría asegurado Bin Laden en el breve comunicado dirgido al presidente norteamericano Barack Obama, titulado “De Osama a Obama”. El líder fundamentalista también habría pedido un cambio en la política exterior norteamericana. “Nuestros ataques continuarán mientras ustedes sigan dando apoyo a los israelíes. Que la paz sea con aquellos que siguen la justa vía”, habría sentenciado Bin Laden.

Desde los Estados Unidos, la respuesta no se hizo esperar. David Axelrod, uno de los principales asesores de Obama, dijo en entrevista con la cadena CNN que no podía confirmar la autenticidad de la cinta. “Asumiendo que en verdad es él, su mensaje contiene las mismas justificaciones vacías del asesinato de inocentes que ya hemos oído en otras ocasiones”, aseguró.

El funcionario fue categórico: “Lo irónico es que, en el nombre del Islam, ha matado a más musulmanes que a personas de cualquier otra religión. Es un asesino y vamos a seguir con la ofensiva contra Bin Laden y contra Al Qaida, para proteger al pueblo norteamericano”.

La reaparición de Bin Laden se produce pocos días antes de la reunión internacional para tratar la amenaza terrorista en Yemen, prevista para el 27 de enero en Londres. El primer ministro Gordon Brown quiso organizar ese foro poco después del fallido intento del joven nigeriano Abdulmutallab, responsable de ingresar a un vuelo de Amsterdam a Detroit con 80 gramos de material explosivo en sus pantalones, quien por una falla en la detonación no cumplió con su cometido.

Tras su detención, el nigeriano había declarado al FBI su conexión con Yemen, donde fue entrenado y equipado para realizar el atentado por agentes del grupo Al Qaida en la Península Arábiga (AQPA), organización nacida de la fusión de las ramas yemení y saudí de la red extremista.

La conferencia internacional, de acuerdo con el ministro británico de Asuntos exteriores, David Miliband, analizará no sólo el surgimiento de la nueva amenaza terrorista en Yemen sino que tratará varios temas. “Supondrá una mirada seria a los asuntos de seguridad, los asuntos económicos y las cuestiones políticas que afronta ese país”, dijo el mandatario en días pasados. Miliband expresó su esperanza en que la conferencia, integrada por 21 países, derive en un compromiso internacional más cohesionado hacia Yemen para frenar la radicalización islamista en la Península Arábiga.

El atentado del vuelo Amsterdam-Detroit fue reivindicado el 28 de diciembre pasado por el grupo Al Qaida de la Península Arábiga. La nueva intervención de Osama bin Laden supondría, de acuerdo con los funcionarios de Inteligencia norteamericanos, un intento de presentarse a sí mismo al mando directo de la organización y sus ramificaciones. “El fallido atentado de Detroit es asumido como una tentativa importante de la dirección de Al Qaida y de su fundador, que se sitúa en la cabeza de una red jerarquizada, que nada tiene que ver con las visiones que califican a la red de dispersa o de nebulosa”, declaró el experto en terrorismo Jean Pierre Filiu. De acuerdo con el especialista, el nuevo mensaje puede arrojar algo de luz sobre el funcionamiento interno de la red terrorista y de sus afiliados.

Mientras tanto, desde el viernes pasado y ante las sendas conferencias internacionales programadas en Londres para tratar el terrorismo en Yemen y la guerra en Afganistán, el gobierno británico incrementó de “sustancial” a “ severo” el nivel de alerta antiterrorista en el país, según informó el diario El País de España. El ministro del Interior, Alan Johnson, aseguró que el incremento en el nivel de alerta no se debe a que haya informaciones de Inteligencia sobre algún plan específico de atentado, pero lo cierto es que, según la evaluación elaborada por el Centro Conjunto de Análisis del Terrorismo, que opera en el seno del MI5, el riesgo de que se produzca un atentado pasó de “fuerte posibilidad” a ser “muy problable”.