Cuba festejó el Día de la Rebeldía sin Fidel Castro, que no participó de los actos. Al vicepresidente José Ramón Machado le tocó hablar de las reformas políticas y económicas en la isla y prometió que los cambios serán estudiados y paulatinos.

Los cubanos recordaron ayer el asalto, en 1953, al cuartel de La Moncada. El acto principal por el Día de la Rebeldía estuvo encabezado por el presidente Raúl Castro. Pero quien ocupó el lugar del orador principal fue su vice, José Ramón Machado. El vicepresidente primero arrancó su discurso resaltando que los cubanos enfrentan las dificultades con una intensa labor y en medio de un entorno adverso que es resultado de la crisis económica mundial. “Cambiaremos en este momento histórico todo lo que deba ser cambiado, pero sin aceptar presiones externas ni menoscabos de nuestra soberanía y sin renunciar a uno solo de nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo”, afirmó el dirigente cubano.

Machado habló en el acto multitudinario celebrado en la plaza Ernesto “Che” Guevara de la ciudad de Santa Clara, 270 kilómetros al este de La Habana. “Los cambios se harán con sentido de responsabilidad, paso a paso, sin improvisaciones ni precipitaciones, para no errar y dejar atrás definitivamente errores o medidas que no se avienen a las condiciones actuales”, explicó.

El vice resaltó que la situación adversa que padece la isla es consecuencia del “anacrónico” bloqueo económico, comercial y financiero con el que Washington asfixia a La Habana. También sumó los desastres climáticos a la lista de pesares que castigan a las islas del Caribe. “Continuaremos el estudio, el análisis y la toma de las decisiones que conduzcan a superar nuestras deficiencias en todos los órdenes y perfeccionar nuestra sociedad. Actuaremos sin soluciones populistas, demagógicas o engañosas. No nos conduciremos por campañas de la prensa extranjera”, prometió el segundo de Raúl. “No tememos a las dificultades ni a los retos que tenemos por delante. Contamos para ello con la fuerza invencible de nuestro pueblo”, dijo Machado ante unas 90 mil personas.

La celebración estuvo empañada por algunas ausencias. Faltó con aviso el presidente venezolano. Hugo Chávez canceló el domingo su viaje a la isla porque dijo que contaba con informes de inteligencia que anunciaban un posible ataque de Colombia. La tensión viene subiendo en los últimos días entre Bogotá y Caracas, después de que la administración de Alvaro Uribe acusara a Venezuela de proteger a las FARC. “Venezuela tiene todo el derecho a defenderse”, afirmó Machado. “Contará siempre con el firme respaldo de todo el pueblo cubano”, apoyó Machado a Chávez.

Según explicó el líder cubano, el Partido Comunista de la isla decidió dedicar este 26 de julio al aniversario del natalicio de Simón Bolívar y a los 200 años de las luchas americanas por la independencia. Por eso estaba previsto que Chávez pronunciara el discurso central del Día de la Rebeldía.

Pero el principal ausente fue Fidel Castro. En los últimos 20 días, el líder histórico de la revolución había recuperado parte de la frenética actividad pública, que había abandonado en 2006 cuando cedió el mando de la isla a su hermano menor. Machado festejó la visible recuperación de Fidel. “Está presente y combatiendo en este día que tanto significa para él y para todos”, dijo Machado.

A pesar de haber faltado al festejo principal, Fidel participó el sábado de un homenaje a los mártires del 26 de julio. Frente al mausoleo que recuerda a los caídos en el asalto a La Moncada, el líder histórico de la revolución leyó su mensaje por los 57 años de esa intentona que fracasó, pero que, al mismo tiempo, significó el inicio de la lucha armada contra el régimen de Fulgencio Batista. “Fueron 57 años de lucha sin tregua por la independencia de nuestra patria”, definió Fidel el camino recorrido.

El comandante no se refirió a las liberaciones de opositores que tuvieron amplia repercusión en los últimos días, aunque sí se refirió a una época de cambios. “Un año como el actual, en que nos aproximamos cada día más a dramáticos acontecimientos, me siento obligado a recordar a los valerosos compañeros encerrados en las prisiones de alta seguridad de los Estados Unidos.”

A pesar de la ausencia en la plaza de Santa Clara, Fidel mantuvo su abultada agenda. Estuvo reunido con el cantautor Silvio Rodríguez y con la organización Pastores por la Paz, una entidad que organiza todos los años protestas contra el bloqueo impuesto por Washington. No trascendió más de la reunión con el referente de la Nueva Trova cubana, sólo lo que Rodríguez publicó en su blog. Sea como fuere, en más de 50 años que lleva la revolución, el de ayer fue el primer 26 de julio en que no hablaron ninguno de los hermanos Castro.