Los rumores sonaban tanto que el presidente mexicano Vicente Fox, ya cerca de la medianoche del miércoles, tuvo que salir a confirmarlo. Fox le pidió la renuncia al canciller Jorge Castañeda y la noticia prenuncia varios cambios más para la semana entrante en un gobierno que se enfrenta, en julio, a las primeras elecciones legislativas que pondrán a prueba su legitimidad. Castañeda tiene hasta el lunes para responder, aunque se descarta que lo haga porque quiere entrar en la política interna y, quizás, hasta ser candidato presidencial para el 2006. El favorito para reemplazarlo es el actual ministro de Economía, Luis Ernesto Dérbez.
Muy activo en las negociaciones diplomáticas, Castañeda hizo que México entrara en el Consejo de Seguridad de la ONU el año pasado y consiguió colocar el tema migratorio en la agenda de los encuentros de Fox con el presidente norteamericano George W. Bush. Pero dirigentes del opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI) lo criticaron precisamente por esto: el tema está colocado en la agenda, pero el acuerdo migratorio jamás llegó.
Sin dudas, por lo que será más recordado el paso de Castañeda por la Cancillería mexicana es por el incidente diplomático con Cuba. Hace diez meses, en la cumbre de Monterrey para el Desarrollo Humano, Fox le pidió a Fidel Castro que abandonara la reunión antes de que llegara Bush. Castañeda habría sido el mentor de la propuesta. Y Castañeda también será recordado por haber sido un intelectual de izquierda que pasó al frente de la Cancillería de un gobierno conservador como el de Fox, del Partido Acción Nacional (PAN), tras 71 años de gobierno de un PRI que supo ser, alguna vez, de centroizquierda.
Además de Dérbez, otros nombres que suenan para el puesto vacante es el de Fernando Canales Clariond (gobernador del estado de Nuevo León y miembro del PAN) y Juan José Bremer, actual embajador mexicano en Estados Unidos. En cualquiera de estos nombres, en especial el de Dérbez, se atisba un cambio de política exterior: menos centrada en el protagonismo de México en los organismos y foros internacionales y más en intereses específicos del país, como los acuerdos comerciales o el migratorio que no alcanzó a hacer firmar el mismo Castañeda. En cuanto al resto de los cambios en el gabinete, varios analistas apuntan que Fox está buscando sacar a los mejores de su gobierno para que se candidateen para julio.