El gobierno cubano anunció que terminó ayer de recuperar los restos de los 68 pasajeros que murieron el jueves al estrellarse el avión de Aerocaribbean. La misión fue muy difícil porque el accidente fue en una zona de espesa vegetación en Guasimal, en la provincia de Sancti Spirito, a 400 kilómetros de La Habana. Los cuerpos de las víctimas están ahora en el Instituto de Medicina Legal de la capital para ser identificados.

Los investigadores siguen en el lugar para tratar de determinar por qué se estrelló el ATR 72-212, un avión construido por la empresa franco-italiana Avions de Transports Régional. El viernes ya habían encontrado la caja negra de la nave y ayer se confirmó que un equipo de técnicos de la empresa va a participar en la investigación junto a los del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba.

Las víctimas extranjeras del accidente son nueve argentinos, siete mexicanos, un venezolano, tres holandeses, dos alemanes, dos austríacos --aunque Austria dijo que se trata de dos australianos--, un francés, un español, un italiano --también de nacionalidad argentina-- y un japonés, según las autoridades cubanas. Las embajadas de Argentina y México gestionaban ayer la repatriación de los restos de sus nacionales, sin que se reportara la llegada de familiares para ayudar a la identificación.