EL MUNDO
› “LA GUERRA NO ES INEVITABLE”, SOSTUVO CHIRAC
Alemania y Francia dicen no
Los parlamentarios de Francia y Alemania, reunidos conjuntamente por primera vez en su historia, se levantaron ayer de sus asientos y aplaudieron al presidente francés Jacques Chirac cuando proclamó: “La guerra no es inevitable”. Acababa de referirse a Irak y la ovación se repitió al señalar al Consejo de Seguridad como el único marco de una “solución legítima” para la crisis. La reunión del presidente francés y del canciller alemán Gerhard Schroeder con los parlamentarios se tradujo así en un mensaje de fuerte simbolismo por parte de dos países que reúnen a 140 millones de personas y se consideran “el centro de gravedad” de la Europa ampliada.
Con Washington lanzado a los preparativos bélicos y Londres atrapado entre su lealtad a Estados Unidos y su presencia en Europa, el Palacio de Versalles, donde se firmó en 1918 el tratado de paz que humilló a los alemanes, se convirtió en el lugar donde se intenta dar vida al “pacto fundacional” del nuevo eje o núcleo duro de Europa. Los aplausos fueron mucho más que una muestra de cortesía hacia un orador, en este caso Chirac, sin duda decidido a buscarse un hueco en la historia. Tampoco se apreciaron diferencias políticas entre los asistentes a la sesión, si bien, desde fuera de ella, el líder ultraderechista Jean-Marie Le Pen se declaró triste al ver a su país “en trance de desaparecer”.