Los países latinoamericanos esperan llevar a cabo una encendida defensa del multilateralismo, tanto en el ámbito político como en el económico, durante la 66ª sesión de la Asamblea General de la ONU. El debate de líderes mundiales se celebrará en Nueva York entre el 23 al 27 de septiembre. La mayoría de los dirigentes latinoamericanos confirmaron su presencia en el organismo mundial que reunirá a 193 países para debatir sobre dos temas que dominarán la agenda: la crisis financiera en los países desarrollados y la demanda palestina de ser considerado un Estado de pleno derecho ante la ONU. Más de 120 países han reconocido oficialmente al Estado palestino, entre ellos todos los latinoamericanos, menos Colombia, Panamá, México y Guatemala.

Al igual que una mayoría de mandatarios de América latina y el Caribe, Brasil insistirá en la necesidad de llevar adelante una reforma de la ONU que refleje mejor la actualidad geopolítica mundial. El gobierno de Dilma Rousseff está especialmente interesado en acceder a un asiento como miembro permanente del Consejo de Seguridad (integrado por 15 países, diez rotatorios y cinco permanentes con derecho a veto), reclamo que sostiene desde hace años.

Una vez más, la presidenta Cristina Fernández (foto) llevará el reclamo de soberanía de Argentina sobre las Islas Malvinas, ocupadas desde 1983 por el Reino Unido. Según señalaron fuentes diplomáticas, Fernández también pedirá que se fortalezca el multilateralismo y más poder dentro de los organismos internacionales para los países emergentes. Si bien Cuba todavía no confirmó quien será su portavoz ante el pleno de la Asamblea, denunciará el bloqueo comercial y económico que pesa sobre la isla, que Estados Unidos impuso en 1962 y desde hace veinte años es condenado por varios países.

Por su parte, el presidente de Ecuador, Rafael Correa –que llegará a Nueva York para reunir apoyo financiero internacional para el proyecto medioambiental Yasuní–, no se presentará ante la ONU por considerar que es un organismo que no sirve, según manifestó desde Quito. Sin embargo, su ministro de Relaciones Exteriores, Ricardo Patiño, abogará por democratizar la ONU y reformar su Consejo de Seguridad, con el argumento de que ese órgano responde a los intereses de los vencedores en la Segunda Guerra Mundial. El gobernante venezolano, Hugo Chávez, no asistirá a la reunión porque se encuentra en Cuba cumpliendo con el tratamiento para vencer al cáncer. Quien sí viajará a Nueva York será su canciller Nicolás Maduro. En tanto, Ollanta Humala, presidente de Perú, hará su primera presentación en la Asamblea General.

El mandatario de México, Felipe Calderón, pedirá por la recuperación de la credibilidad de la ONU con un mayor liderazgo político. Además, planteará temas migratorios, de medio ambiente y de control de armas y narcotráfico. En tanto, el crimen organizado y los programas sociales de su gobierno centrarán la intervención del mandatario de Guatemala, Alvaro Colom. El gobernante de la República Dominicana, Leonel Fernández, presentará ante la Asamblea General su propuesta para alcanzar un consenso internacional para la estabilidad de los precios, que permita combatir la especulación financiera sobre el petróleo y los alimentos.

El mandatario chileno, Sebastián Piñera, anunció que mantendrá una apretada agenda de reuniones bilaterales en Nueva York, entre ellas con las presidentas Fernández y Rousseff. También con Tony Blair. Los países que forman la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA) tienen pensado expresar una posición conjunta de rechazo ante lo que consideran una intervención y agresión militar ilegal de la OTAN sobre Libia.