El flamante ministro de Economía, Luis de Guindos, lanzó un pronóstico inquietante para el futuro de España, al vaticinar una caída de la economía local en el primer trimestre de 2012. Para los últimos tres meses de este año, el titular de la cartera de Economía calculó un decrecimiento de entre 0,2 y 0,3 por ciento. Esta caída del Producto Interno Bruto (PIB) seguiría al estancamiento registrado entre julio y septiembre. “Volvemos a una etapa de crecimiento negativo en el cuarto trimestre; los dos próximos trimestres no van a ser sencillos en términos de crecimiento y empleo”, aseguró De Guindos. España, que lleva cerca de cuatro años estancada en una crisis económica, entró en recesión en el último trimestre de 2008, por primera vez en quince años, y no logró salir hasta el primer trimestre de 2010. El ministro de Economía y Competitividad defendió la necesidad de “buscar un crecimiento más sostenible que dé mayor capacidad para competir” como fórmula para salir de esta situación.

Durante la toma de posesión de altos cargos de su ministerio, De Guindos –quien evitó emplear la palabra “recesión”– dijo que la difícil situación supondrá “un acicate” para impulsar las reformas necesarias, entre ellas la del sector financiero, que considera vital e imprescindible, y la del mercado de bienes y servicios, orientada a la eliminación de trabas burocráticas. Además remarcó como otra de las tareas prioritarias de su departamento la rápida integración de las competencias en ciencia y tecnología, con el objetivo de avanzar en un modelo de crecimiento más sostenible.

De Guindos afirmó, sobre la situación de los países de la Zona Euro, que se juegan mucho en los próximos meses y expresó su confianza en que España tenga un papel relevante en ese proceso de toma de decisiones e implementación de reformas. El ex presidente del gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, está convencido de que resulta indispensable reducir el déficit público porque es el termómetro de la capacidad de financiación de España. Pero pidió un motor para el crecimiento y la confianza en la inversión. “Sabemos que la reducción del déficit afecta al potencial de crecimiento, porque el consumo público se reduce y eso reduce la demanda interna, pero la reducción del déficit es una condición indispensable”, afirmó Zapatero en una entrevista publicada ayer por el Diario de León, la primera desde que dejó el cargo.

En tanto, el diario El País de España informó que entre enero y septiembre de este año 50.521 españoles hicieron sus valijas en la búsqueda de nuevos rumbos, cifra que implica un 36,6 por ciento más de españoles que tomaron esa decisión en 2010. Estos datos fueron difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este panorama se produce en un país donde, por primera vez en los últimos tiempos, la emigración supera a la inmigración. El Reino Unido, Francia, Estados Unidos y Alemania son los destinos preferidos por los españoles que abandonan el barco.

La radiografía de la emigración española describe, según estimaciones de 2010 difundidas por el INE, el perfil del emigrante: el 52 por ciento son varones y el 48 por ciento, mujeres. “La diferencia se debe a que entre los extranjeros los hombres sufren un paro mayor que las mujeres. Las familias se fragmentan. Ellas se quedan porque conservan el empleo y ellos se van con algún hijo”, analiza el catedrático de sociología Antonio Izquierdo, de la Universidad de La Coruña.