El presidente de Uruguay, José Mujica, se reunió con el ex mandatario de Brasil Inácio Lula da Silva y dijo que éste se encuentra bien de la cabeza y del corazón. Lula se está tratando por un cáncer de laringe. Pepe Mujica dijo que le gustaría formar un grupo de intelectuales para promover la integración regional. “Con Lula estamos empeñados en formar un grupo de pensadores para darle cuerpo a una doctrina de la integración”, dijo el ex tupamaro a periodistas después de un encuentro informal con el histórico líder del Partido de los Trabajadores.

Lula es un antiguo compañero de la militancia de izquierda sudamericana de Mujica, de las décadas del setenta y ochenta. El mandatario uruguayo reveló que la integración latinoamericana fue el principal tema que trató con Lula durante las más de tres horas en que estuvieron reunidos. “Queríamos hablar de esa política, de cómo Lula está viendo el mundo y los rumbos de América, y por eso es necesario unir a los intelectuales latinoamericanos para construir la matriz de una política de integración”, apuntó el ex guerrillero y ahora presidente uruguayo. Para Mujica, Latinoamérica vive un momento que nunca tuvo. “A pesar de todas las dificultades, esta parte del continente nunca soñó con ser una América latina con la fuerza que tenemos hoy”, dijo.

“Los pueblos no se dan cuenta de la importancia concreta de la integración para su propia vida, y tal vez China no necesite de integración, pero nosotros la necesitamos y ésa fue la preocupación de Lula, de eso fue que hablamos”, agregó Mujica.

El jefe de Estado uruguayo manifestó que la región pasó 300 años con los países dándose la espalda y mirando hacia Europa, pero ahora es el momento de revertir ese panorama, con un Mercosur que creció económicamente, pero que tiene que superar algunas dificultades institucionales. “El Mercosur está mejor que antes, pero todavía puede mejorar, está mejor porque los países crecieron, pero enfrentamos dificultades institucionales”, dijo el mandatario. Sobre el estado de salud de Lula, Mujica comentó que el ex presidente tiene la perspicacia, la disposición y alegría de vivir de siempre. Después de compartir un almuerzo entre amigos en un hotel de San Pablo, Mujica y su esposa –la senadora Lucía Topolanski– fueron a visitar algunos museos de la ciudad. El asesor de Lula indicó que el ex mandatario se sometió ayer a la décima sesión de radioterapia, de 33 programadas, y de inmediato se desplazó al hotel Sofitel Ibirapuera, donde están alojados en visita privada el jefe de Estado uruguayo y su esposa.

Del almuerzo, que fue en la habitación de Mujica, también participó el ex secretario general de la Presidencia de Brasil Luiz Dulci, actual asesor para Asuntos de América Latina del Instituto Cidadanía.

“Fue un almuerzo entre amigos, pues ellos tienen una amistad desde mucho antes de convertirse en presidentes de sus países, y la reunión no tuvo ningún tipo de agenda o temario formal”, dijo a periodistas José Crispiniano, portavoz del Cidadanía, fundado por Lula después de dejar el poder en enero del año pasado.

Lula, el primer presidente de izquierda en la historia de Brasil, dirigió el país entre enero de 2003 y diciembre de 2010 y dejó la jefatura de Estado con un record de 80 por ciento de popularidad tras dos mandatos consecutivos de gobierno. El 4 de enero comenzó un tratamiento de radioterapia, que debe durar entre cinco y siete semanas y apunta a erradicar por completo un tumor que fue detectado a finales de octubre.