En un momento clave por la expectativa que genera la enfermedad del presidente venezolano, Hugo Chávez, la Asamblea de Venezuela convocó para mañana a la primera sesión del año. El cuerpo elegirá a su nueva junta directiva, que sería presidida una vez más por Diosdado Cabello. La convocatoria fue confirmada por el presidente del foro legislativo, el propio Diosdado Cabello, cargo al que la Constitución asigna un rol decisivo en los próximos días, ante la posibilidad de que Chávez, quien convalece en La Habana, Cuba, no pueda asumir el 10 de enero.

El presidente de la Asamblea recalcó que el oficialismo tiene claro lo que hará en adelante. “Información para los jefes de la oposición venezolana: los chavistas tenemos muy claro lo que haremos, ocúpense de lo que harán ustedes”, adelantó a través de su cuenta de Twitter.

La junta directiva que será elegida estará dotada de un presidente y dos vicepresidentes. Los pronósticos indican que Cabello seguirá al frente y que sus acompañantes seguirán siendo miembros del oficialismo, como ocurrió hasta ahora. La salida del primer vicepresidente, Aristóbulo Istúriz, quien fue electo gobernador del estado oriental de Anzoátegui, abrió una vacante para los diputados del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). La diputada Blanca Eekhout podría pasar de la segunda a la primera vicepresidencia y para ocupar su puesto suena el ex jefe legislativo Fernando Soto Rojas. El oficialismo tiene una mayoría simple en la cámara –97 escaños, 104 con aliados, contra 68– y hasta ahora la oposición no ha figurado en la directiva.

Asimismo, la condición del mandatario “sigue siendo estable dentro de su cuatro delicado”, reveló el miércoles a través de su cuenta de Twitter el ministro de Ciencia de Venezuela, Jorge Arraza. El oficialismo estima que si Chávez no está en condiciones de asumir en la fecha constitucional, la Asamblea Nacional tiene que traspasar esa función al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que tomará el juramento en un plazo que la Carta Magna no establece y que, según versiones, podría ser dentro de tres o hasta seis meses. En cambio, sectores de la oposición interpretan que si Chávez no pudiera asumir el 10 de enero el mandato 2013-2019 y se declarase su falta absoluta, el titular de la Asamblea debería asumir la presidencia y tomar el control hasta que se lleve a cabo una nueva elección de mandatario, dentro de los 30 días. Por eso, la oposición venezolana centra sus esfuerzos en encontrar la unidad y el consenso para que con el beneplácito del gobernante PSUV pueda entrar en la nueva directiva del Parlamento, de la que, entienden, podría salir temporalmente el próximo jefe de Estado. En este contexto, el secretario ejecutivo de la coalición opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD), Ramón Guillermo Aveledo, advirtió que la situación de crisis política requiere de una directiva legislativa plural. Además, la oposición anticipó que reclamará una vicepresidencia en el Parlamento en aras de ayudar a la gobernabilidad del país.

El cambio de junta directiva de la Asamblea Nacional tendrá lugar cinco días antes de que se inicie el mandato presidencial 2013-2019, para el cual Chávez fue reelecto hace tres meses.

Ante la situación de incertidumbre que vive Venezuela, la portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Victoria Nuland, dijo ayer que Estados Unidos no está involucrado en lo que suceda en ese país a causa del estado de salud del presidente Hugo Chávez. “Obviamente hablamos con venezolanos de todo el arco político, como hacemos con todos los países en el mundo. Cualquier transición política en Venezuela tiene que ser producto de decisiones por parte de venezolanos, no existe una solución ‘made in America’”, declaró en rueda de prensa. Además, la portavoz aseguró que Wa-shington no tiene más noticias que las que se han hecho públicas sobre el estado de salud de Chávez. Quien también habló ayer sobre la situación en la que se encuentra el mandatario fue la senadora uruguaya Lucía Topolansky, esposa del presidente uruguayo, José Mujica, que en declaraciones al portal UNoticias, manifestó que el cuadro de Chávez es “complejo” y la situación en general es “bastante imprevisible”.