EL MUNDO
› TONY BLAIR PROYECTA SU REELECCION COMO PREMIER
Al mal tiempo, un escape al sol
› Por Marcelo Justo
Acosado por la peor crisis de sus seis años de gobierno, asediado por las revelaciones sobre la muerte del científico David Kelly y la ausencia de armas de destrucción masiva en Irak, el primer ministro Tony Blair pasó a la ofensiva en la última conferencia de prensa que dio antes de iniciar sus vacaciones de verano en Barbados. El primer ministro admitió que enfrenta una pérdida de confianza por la muerte del principal experto gubernamental sobre el programa de armas químicas iraquíes, David Kelly, pero defendió la guerra contra Irak y señaló que estaba dispuesto a buscar un tercer mandato en las elecciones que se deben celebrar a más tardar en el 2006. “Es verdad que necesitamos recuperar la confianza de la población, pero sigo convencido que nuestra acción en Irak fue la correcta. Las armas de destrucción masiva y el terrorismo son las principales amenazas del siglo XXI. Es algo que tendremos que probar con el tiempo, tanto en relación con las armas de destrucción masiva, como con las mejoras que se producen en las condiciones de vida en Irak”, subrayó Blair.
Las preguntas sobre el caso Kelly, que hizo tambalear al gobierno, chocaron con el muro de la investigación judicial que iniciará este viernes el juez lord James Brian Hutton. “Es importante que esperemos a que se conozcan los resultados de esta investigación judicial independiente. Creo que hay elementos para que tanto los medios como los políticos reflexionen”, indicó Blair. En un intento de escapar a las preguntas sobre Irak y el aparente suicidio de David Kelly, Blair destacó los logros de su gobierno en cuestiones económicas y sociales. “Hemos logrado combinar la competencia económica y la justicia social. Sabemos que hay mucho por hacer aún, pero hemos conseguido los índices más bajos de inflación y desempleo en décadas y hemos rescatado de la pobreza a medio millón de menores”, dijo Blair. El primer ministro subrayó que este sábado romperá el record de permanencia de un gobierno laborista en el poder. Desde que ganó las elecciones el primero de mayo de 1997, Blair se propuso romper con el hechizo histórico de los laboristas que en el siglo XX sólo consiguieron ser reelectos una vez sin completar su segundo período de gobierno. Esto ocurrió con el gobierno de Clement Attlee que gobernó entre 1945 y 1951 y cuyo “record” Blair quebrará en tres días. Confiado y con las vacaciones por delante, Blair se atrevió a proyectar una próxima reelección. “Todavía queda mucho trabajo por hacer. Mi apetito por hacerlo no ha disminuido”, indicó el primer ministro. Pero no parece que sus problemas se vayan con el avión que toma a Barbados para pasar tres semanas al sol.