EL MUNDO
› PROBLEMAS DE EE.UU. PARA REFORZAR SUS CONTINGENTES
Un despliegue que nunca se completa
Por Marisol Rueda *
Desde Madrid
Durante el último mes, el gobierno de EE.UU. ha emprendido una batalla para ampliar las fuerzas de coalición en Irak. Pretende apoyar su política de pacificación, relevar y reforzar a las tropas aliadas que se encuentran en la zona. Sin embargo, aunque el pasado 28 de julio, el Departamento de Estado norteamericano anunció la participación de 30 países, reina una confusión en torno del número y de la contribución de cada país.
Hasta ahora, Washington cuenta en Irak con sus cerca de 147.000 soldados y 11.000 británicos. En los últimos días, se le unieron España, Italia y Polonia, y hay otros países como Alemania, Francia, India y Rusia que esperan una segunda resolución de la ONU para aprobar el envío de tropas a la zona del conflicto. El pasado 2 de julio, Polonia envió 250 hombres a Irak, parte de un contingente de 2300 soldados, que unidos a los altos mandos de su ejército estarán en el país asiático el próximo 1º de septiembre. España, que aprobó la participación de 1300 militares, concluirá el despliegue de sus tropas entre el 10 y el 13 de agosto. Por su parte, Italia inició a mediados de junio el envío de sus unidades militares, que suman 2850 hombres.
El caso de Australia es confuso. El pasado 17 de julio, el jefe de las fuerzas armadas, el general Peter Cosgrove, garantizó que sus 1000 hombres están desplegados en el Golfo Pérsico y que no entrarán en Irak hasta recibir “órdenes específicas”. Sin embargo, el retirado jefe de los servicios de espionaje, Patrick Lang, dijo estar “casi seguro” de que fuerzas de espionaje australianas han estado en Irak. El pasado 28 de julio, el Departamento de Estado norteamericano afirmó que 30 países se han ofrecido a participar en las operaciones militares y policiales en Irak. Pero el futuro de las operaciones no es claro, teniendo en cuenta las limitaciones de todo tipo que afrontan varias de las naciones involucradas. Hungría, por ejemplo, ofreció el envío de una compañía de camiones, pero no tiene vehículos disponibles. El gobierno de Japón, otro que ha ofrecido su ayuda, se enfrenta a la oposición parlamentaria, que se prepara para bloquear la ley que permitirá la expedición de su ejército a Irak. El hecho es que EE.UU., que empezó la invasión casi solo, ahora ve que necesita aliados.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.