El presidente norteamericano, Barack Obama, se reunió ayer en la Casa Blanca con su par chilena Michelle Bachelet. En el encuentro, el mandatario anfitrión expresó que “Chile es un modelo de democracia en Latinoamérica, que ha sido capaz de tener una consistente transición de gobiernos de centroizquierda a gobiernos de centroderecha, pero siempre han respetado las tradiciones democráticas”.

Dirigiéndose a su interlocutora, el mandatario destacó que “obviamente, esas tradiciones costaron trabajo y la presidenta Bachelet sabe mejor que nadie lo difícil que fue lograr la democracia; y el hecho de que ahora Chile respete y luche por el proceso democrático en todo el espectro político, lo convierte en un gran modelo para todo el continente”. Los mandatarios abordaron las relaciones comerciales entre ambos países, ocasión en que Obama aseveró que “Chile es un país confiable para las inversiones”. Por su parte, Bachelet señaló que “este año conmemoramos diez años del tratado de libre comercio entre Chile y Estados Unidos, el cual es nuestro inversor extranjero más importante y queremos continuar en ese camino”. Ni él ni Bachelet mencionaron las negociaciones para el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), al que Chile pertenece junto a otros tres países y al que Estados Unidos quiere incorporarse dentro de un grupo de ocho países más. Obama, quien también destacó el trabajo de la jefa de Estado en la ONU previo a su regreso a La Moneda, bromeó al señalarle que “es mi segunda Michelle favorita”, después de su esposa, lo que provocó risas al interior del salón.