BRASIL

Ser o no ser gerenta

La candidata a la presidencia por el Partido Socialista Brasileño (PSB), Marina Silva, dirigió ayer críticas a la actual mandataria y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, en su primer acto público tras ser confirmada su candidatura. En lo que fue interpretado como una alusión al eslogan implantado por el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva durante la campaña que llevó a Rousseff a la presidencia, “Dilma, la gerenta de Brasil”, la líder ecologista rechazó la idea de que para ser un buen presidente se debe ser un buen “gerente”. “Itamar (Franco, 1992-1995) no era un gerente, era un hombre con visión estratégica; Fernando Henrique (Cardoso, 1995-2003) era un académico, no era un gerente, pero con visión estratégica; Lula era obrero, pero (era) un hombre con visión estratégica. Cuando se tiene visión estratégica se sabe unir a un equipo, se consiguen los mejores gerentes”, aseveró. Silva realizó su primer acto de campaña tras la trágica muerte del candidato original de los socialistas, Eduardo Campos, en la ciudad de Recife, capital provincial de Pernambuco.

BOLIVIA

Evo contra la Iglesia

El gobierno de Bolivia acusó a los obispos de hacer una “guerra sucia” contra el presidente Evo Morales por criticar el uso de bienes del Estado en su campaña para las elecciones del 12 de octubre. La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, calificó a la Iglesia como “rival político” y dijo que “una vez más hace la guerra sucia que siempre ha hecho” contra el mandatario, convertida en “portavoz de las estructuras más conservadoras de derecha”. Según Dávila, la Iglesia Católica se opone al gobierno desde que asumió el presidente Morales, en 2006, y desde entonces “ha ido trabajando en contra de las políticas que benefician más al pueblo, incluso la nacionalización de los hidrocarburos”. Su colega de Economía, Luis Arce, dijo a su vez que la Iglesia “se está convirtiendo en un partido político más” y que promueve “debates que no le corresponden”, aunque el gobierno “no se mete a ver qué se hace con la plata que llega a la Iglesia Católica”.