Los principales partidos políticos de Uruguay cerraron ayer sus campañas para las elecciones de este domingo, en las que el candidato oficialista Tabaré Vázquez es favorito. Ante 65.000 personas, en el acto más concurrido, Vázquez defendió la gestión del Frente Amplio (FA) y se mostró confiado. La firma Interconsult atribuyó ayer entre 43 y 44 por ciento de los votos al FA, entre 33 y 34 por ciento al Partido Nacional (PN), y entre 14 y 15 por ciento al Partido Colorado (PC). Sin embargo, las consultoras estiman que la elección se definirá recién el 30 de noviembre próximo en una segunda vuelta que dependerá de los realineamientos posteriores, la conformación del próximo Congreso y hasta los gestos que los candidatos hagan la misma noche de la elección, según especialistas. A la medianoche comenzaron la veda política y las 48 horas de reflexión que marca la Constitución.

Con el lema “Que no se detenga”, el FA convocó al “Gran acto final de campaña”. La consigna de la coalición de izquierda se refiere a los diez años que lleva en el gobierno y el impulso económico que recibió el país en ese período. El FA eligió el barrio Punta Carretas, en la zona de la rambla de Montevideo, para realizar el cierre de su campaña, en un acto que encabezarán el propio Vázquez –que gobernó Uruguay entre 2005 y 2010– y su compañero de fórmula, Raúl Sendic, ex presidente de la empresa estatal de petróleo Ancap e hijo del histórico líder guerrillero tupamaro del mismo nombre. “Este es el mejor momento de la historia del país, no hay mejores antecedentes”, expresó el compañero de Vázquez.

El Partido Nacional, principal fuerza de la oposición, eligió la ciudad de Las Piedras, en el departamento de Canelones –el segundo en importancia del país– para su acto final. Sin embargo, utilizó la redes sociales convocando a “desbordar” la ciudad de “ilusión y esperanza”. El candidato Luis Lacalle Pou acumula una intención de voto de entre 29 y 32 por ciento. “El domingo vamos a tener que acostumbrarnos a que la ciudadanía no va a darle la mayoría a un solo color y va a obligarnos a conversar”, afirmó ayer durante el acto el hijo del ex presidente Luis Alberto Lacalle (1990-1995).

El candidato del Partido Colorado, Pedro Bordaberry, eligió también las redes sociales para invitar al acto de cierre de campaña. Durante el acto partidario, que se de-sarrolló junto al puerto del Buceo montevideano, Bordaberry apuntó contra la política de despenalización del consumo de marihuana. “Al adicto no hay que darle con un palo, como dijo Mujica. Al adicto hay que ayudarlo y no se le ayuda dándole más droga”, disparó el candidato conservador.

El FA llevará entre sus candidatos al Senado al actual presidente José Mujica, al vicepresidente Danilo Astori y a varios funcionarios del actual gobierno. La senadora y primera dama Lucía Topolansky declaró en una entrevista publicada ayer por el diario La República que el FA “ya la tiene ganada” la elección del domingo y que para su fuerza “la yapa” de la victoria sería que en Brasil ganara la presidenta Dilma Rousseff en la segunda vuelta electoral que también se disputa el mismo domingo. “Yo voy a lo máximo, que es ganar en la primera vuelta, con mayoría parlamentaria y que no se apruebe a favor la reforma constitucional de bajar la edad de imputabilidad”, apuntó Topolansky.

Los últimos sondeos de Cifra, Factum y Equipos promedian para la fórmula de Vázquez-Sendic un apoyo en primera vuelta de 43,5 por ciento, y para los candidatos Lacalle Pou-Larrañaga, un 32,5 por ciento. En tercer lugar, ya fuera de las aspiraciones de segunda vuelta, aparece el PC, que con Bordaberry y Germán Coutinho reúne entre 15 y 18 por ciento, según las distintas encuestadoras.

“Las posibilidades (para la segunda vuelta) se dividen mitad y mitad; estos números son buenos para el Frente pero hay que esperar a ver cómo les caen estas cosas a los votantes uruguayos, que se van a despertar el lunes y van a ver que la Legislatura es así o asá”, expresó Luis Eduardo González, director de Cifra, en referencia a la posibilidad del FA de mantener la mayoría parlamentaria.

Ignacio Zuasnabar, director de Equipos, anticipó a Canal 10 que el inicio de campaña de segunda vuelta será “extremadamente parejo y competitivo”, donde las políticas de alianzas de los candidatos y los tonos de la campaña durante noviembre van a ser decisivos para determinar quién será el próximo presidente. En tanto, el director de Factum, Oscar Botinelli, consideró ante una consulta de Canal 4 que serán claves las señales que emitan en la misma noche de este domingo tanto Vázquez como Lacalle Pou, seguros competidores en la segunda vuelta.

Uruguay elegirá presidente y vicepresidente, además de renovar por completo los 99 diputados y 30 senadores, en un escenario en el que las tres consultoras ven difícil que el oficialismo pueda conservar la mayoría que hoy posee en ambas cámaras.

El secretario del FA, Pablo de los Reyes, estimó ayer que alrededor de 10.000 uruguayos residentes en el exterior regresarán para votar en los comicios, la mayoría procedentes de Argentina. De acuerdo con el funcionario, este cálculo se basa en la experiencia de elecciones pasadas y en las informaciones que reciben de los responsables de su campaña en Argentina.

“Hay un porcentaje muy alto de uruguayos frenteamplistas en Argentina”, aseguró de los Reyes, y destacó el “éxito de audiencia” del acto electoral celebrado por su partido en Buenos Aires el 11 de octubre.

Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos argentino (Indec) divulgadas en 2011, se calcula que en Argentina residen legalmente cerca de 117.000 uruguayos, aunque los datos oficiales de Uruguay sitúan esta cifra en 300.000 y los extraoficiales, en más de medio millón. En las elecciones internas de 2009, la presidenta Cristina Kirchner acordó dar dos días libres en el trabajo a los uruguayos residentes en Argentina que hubiesen ido a votar, iniciativa que se repetirá en esta ocasión. El voto en Uruguay es obligatorio y no existe la modalidad de votación en consulados o embajadas.