Los delegados del gobierno colombiano en los diálogos de paz con las FARC en Cuba condenaron ayer el asesinato de dos indígenas de la comunidad Nasa en el departamento del Cauca (sudoeste), crimen que, según las autoridades, fue cometido por miembros de esa guerrilla. Las dos víctimas pertenecían a la Guardia Indígena del Norte del Cauca y fueron asesinadas el pasado miércoles cuando perseguían a guerrilleros de las FARC que habían intentado atentar contra el líder comunitario Edgar Tumiñá en la vereda El Cestiadero, en el municipio de Toribío, según las autoridades.

“La delegación del gobierno de Colombia repudia el asesinato por parte de las FARC de Daniel Coicué y Manuel Antonio Tumiñá, de la comunidad Nasa, y el atentado contra Edgar Tumiñá, en los resguardos de San Francisco y Toribío, en el departamento del Cauca”, expresó el equipo negociador del gobierno (foto) en un comunicado. Los dos indígenas habían estado trabajando también en la retirada de una valla con propaganda alusiva al que fuera el número uno de las FARC, Guillermo León Sáenz, alias Alfonso Cano, muerto el 4 de noviembre de 2011 en una operación militar en Suárez (Cauca).

“Nada justifica la muerte y ataque de estos miembros de la guardia indígena que, inermes, quisieron retirar una valla que a todas luces resultaba agresiva y violenta para su comunidad”, agrega el comunicado.

Los negociadores de paz del gobierno consideran “inadmisible” que mientras se avanza en las conversaciones en La Habana para terminar el conflicto en Colombia, las FARC continúen atacando a la población civil de esta manera. “Reiteramos el llamado para que las FARC cesen inmediata y definitivamente todo ataque a la población civil”, añade el mensaje en el que los negociadores expresaron además sus condolencias a los familiares de las víctimas y la solidaridad con el pueblo Nasa.

Entidades del gobierno y organismos internacionales como la ONU también han condenado el asesinato de los dos miembros de la Guardia Indígena, un organismo que se encarga de la organización y defensa de los derechos, el territorio, la autonomía y la cultura propia de los pueblos del departamento del Cauca.