Los trabajadores del metro de Atenas iniciaron ayer una huelga de 48 horas contra una ley diseñada por el gobierno griego que contempla nuevos aumentos de impuestos y recortes. Será votada hoy en el pleno del Parlamento a la espera de que el Eurogrupo habilite un nuevo tramo del préstamo financiero.

Los trabajadores del servicio de colectivos y trenes interurbanos también acatarán la huelga sólo que se suman a partir de hoy para no causar molestias a los pasajeros que ya adquirieron un ticket, informaron los sindicatos. Además, está prevista una manifestación en la plaza Syntagma, frente al Parlamento griego, a la que están llamados los trabajadores de los medios de transporte, así como también empleados públicos y privados adheridos a los sindicatos Adedy y GSEE.

GSEE recordó en un comunicado que después de lo negativo que resultó el recorte a las jubilaciones impuesto semanas atrás, el Gobierno continúa su trabajo destructivo, con un golpe de gracia a toda la sociedad griega a través de nuevos impuestos y venta de bienes públicos. Adedy por su parte señaló que espera que no se apruebe el memorándum bárbaro y que no se apliquen los recortes en pensiones y gasto social.

La ‘ley escoba’ que quiere aprobar el gobierno de la coalición de Syriza y Griegos Independientes (ANEL), contempla aumento de impuestos indirectos, incluido el IVA, con los que el Ejecutivo espera recaudar 1.800 millones de euros al año, que se unen a los 3.600 millones al año en recortes y subidas de gravámenes aprobados hace dos semanas.

El paquete también liberaliza la venta de créditos morosos a fondos de inversión, configura el mecanismo de recorte automático del presupuesto en caso de que el gobierno no cumpla los objetivos de superávit acordados con los acreedores y establece un nuevo fondo de privatizaciones que sustituirá al antiguo Taiped y que tendrá más atribuciones.

Además, el jueves el ministro de Finanzas, Euclkides Tsakalotos, introdujo una enmienda a la ley que contempla congelar los salarios de los funcionarios públicos en “régimen especial”, es decir jueces, personal militar o policías, durante dos años, medida con la que espera ahorrar hasta 118 millones de euros por ejercicio. El Ejecutivo quiere que tras la aprobación de este segundo paquete de reformas el Eurogrupo del martes concluya la primera revisión del tercer rescate y abone el primer tramo del mismo, con el que Grecia hará frente a obligaciones de pago de deuda y a atrasos en otros pagos.