Israel se prepara para despedirse mañana del último de sus padres fundadores, el Premio Nobel de la Paz Shimon Peres, que falleció a los 93 años, con un homenaje al que asistirán líderes de todo el mundo.

El cuerpo del ex presidente será llevado al parlamento en Jerusalén hoy, para que los israelíes puedan despedirse del político laborista, impulsor de los acuerdos de Oslo y también padre del programa nuclear israelí. Peres será enterrado el viernes en el cementerio nacional de Monte Herzl, un homenaje al que asistirán líderes de todo el mundo que buscan expresar su cariño a un político que consideraban como un amigo, al que reconocen su tenacidad, su visión y la valentía que mostró al impulsar un proceso de paz con los palestinos.

Peres falleció en el hospital mientras dormía, tras haber sufrido dos semanas antes un accidente cerebrovascular, dijo su médico personal y yerno, Rafi Walden. “Nos dejó sin sufrir. Estaba rodeado de familiares’’, agregó más tarde a la prensa. “Con una profunda tristeza hoy nos despedimos de nuestro padre amado, el noveno presidente de Israel, Shimon Peres’’, dijo a la prensa entre lágrimas su hijo Chemi en el hospital Tel Hashomer de Ramat Gran, cerca de Tel Aviv.

Con Shimon Peres desaparece el último superviviente de la generación de los padres fundadores del Estado de Israel y uno de los principales artífices de los acuerdos de Oslo, que sentaron las bases de una autonomía palestina en los años noventa y dieron la esperanza a una resolución del conflicto. Peres era la única figura todavía con vida de los tres hombres que compartieron el Premio Nobel de la Paz en 1994 por sus esfuerzos en favor de la paz en Oriente Medio, tras la muerte del ex primer ministro israelí Yitzhak Rabin –asesinado en 1995– y del ex presidente palestino Yaser Arafat, en 2004.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel dijo que una larga lista de líderes mundiales asistirán a los funerales de Peres mañana. El vocero de la Cancillería, Emmanuel Nahshon, dijo que entre los que confirmaron su presencia estaban el presidente estadounidense, Barack Obama, Bill y Hillary Clinton, el príncipe Carlos de Inglaterra y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, además de numerosas personalidades. La Cancillería israelí incluyó al papa Francisco entre los dignatarios que se esperaban, pero el vocero del Vaticano, Greg Burke, lo desmintió e hizo notar que el Pontífice emprende el viernes un viaje de tres días a Georgia y Azerbaiyán.

Responsables de todo el mundo le rindieron homenaje. El Papa dijo que espera que su legado a favor de la paz y la reconciliación de los pueblos sea honrado con celeridad. Francisco recordó los esfuerzos en favor de la paz de Shimon Peres, al tiempo que pidió que su memoria nos inspire para trabajar por la reconciliación entre pueblos. “Me entristeció profundamente la noticia de la muerte de su excelencia Shimon Peres, y deseo transmitir a usted y a todo el pueblo de Israel, mi más sentido pésame”, escribió el Pontífice en un telegrama que envió ayer al presidente israelí Reuven Rivlin. “Recuerdo con cariño mi tiempo con Peres en el Vaticano y renuevo mi gran aprecio por los esfuerzos sin cansancio del fallecido presidente en favor de la paz”, agregó Francisco en el telegrama, que lleva la firma del secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin.

“Así como el Estado de Israel está de luto, deseo que su memoria y tantos años de servicio nos inspiren a todos para trabajar con urgencia por la paz y la reconciliación entre pueblos”, pidió el Pontífice. “En esa dirección, su legado será verdaderamente honrado y el bien común por el que trabajó tan diligentemente encontrará nuevas expresiones, para que la humanidad se esfuerce por avanzar en el camino hacia una paz duradera”, sentenció. “Con la seguridad de mis rezos para todos los que lloran, especialmente para la familia Peres, invoco las bendiciones divinas del consuelo y la fuerza sobre la nación”, finalizó.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, expresó su pesar personal por la muerte de Shimon Peres y convocó una reunión especial de su gabinete en la que pronunciará un discurso sobre él. “Shimon dedicó su vida al renacimiento de nuestro pueblo. Era un visionario que miraba hacia el futuro’’, dijo en un comunicado, en el que pareció aludir a la implicación de Peres en el desarrollo del programa nuclear israelí y las capacidades militares del país. Mientras que Obama, reiteró su compromiso para que israelíes y palestinos alcancen un acuerdo de paz como “tributo” a su “amigo”, el fallecido ex presidente. “Era una de esas personas que cambian el curso de la historia’’, dijo Obama. “Un genio de gran corazón’’, según el ex presidente Bill Clinton, que supervisó la firma de los acuerdos de Oslo en 1993. El presidente ruso, Vladimir Putin, elogió su valentía y su sentimiento patriótico. El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, tras varias horas de silencio, se refirió a la muerte de Peres y dijo fue que fue un socio valiente para la paz e hizo esfuerzos constantes e ininterrumpidos para alcanzar la paz desde Oslo.

Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, saludó ayer los esfuerzos de Peres para alcanzar una solución al conflicto israelí-palestino mediante la coexistencia de dos Estados. “Trabajó incansablemente para la solución de dos Estados que permitiría vivir a Israel en seguridad y armonía con los palestinos y en toda la región’’, declaró Ban en referencia al ex presidente israelí.

Sus allegados describieron a Peres fiel a su reputación, una figura infatigable hasta hace apenas unas semanas, comprometido con Israel, la paz y el futuro. Después de sufrir dos percances cardíacos en enero, retomó sus viajes, recordó su yerno. El 13 de septiembre se hallaba en buen estado cuando pronunció un discurso de una hora. Pero ese mismo día sufrió un accidente cerebrovascular grave con hemorragia interna. En su país, tras formar parte de los grandes acontecimientos de la historia de Israel y de las controversias del mundo político israelí, Peres había pasado a ser una persona de consenso, considerado un sabio de la nación. “Era un visionario inclinado hacia el futuro. Era también un paladín de la defensa de Israel’’, describió Netanyahu.

Primer ministro en dos ocasiones, de 1984 a 1986 y en 1995-1996, presidente de 2007 a 2014, Peres ocupó durante más de medio siglo de vida pública las carteras de Relaciones Exteriores, Defensa, Información, Transportes e Integración. A pesar de los acuerdos de Oslo y de la conversión a la paz de este antiguo halcón laborista, los palestinos tienen una imagen negra del hombre que avaló los primeros asentamientos judíos de Cisjordania ocupada, y que era primer ministro cuando la aviación israelí bombardeó el pueblo libanés de Can, que dejó 106 civiles muertos en 1996.

El movimiento islamista palestino Hamas dijo ayer que Peres fue uno de los arquitectos de la ocupación militar israelí de Palestina y que su muerte hace “muy feliz” al pueblo palestino y marca el inicio de una fase de debilidad de la potencia ocupante. “El pueblo palestino está muy feliz por la muerte de este criminal que provocó el derramamiento de su sangre”, dijo el vocero de Hamas, Sami Abu Zuhri. “Shimon Peres era el último funcionario israelí que quedaba de los que fundaron la ocupación, y su muerte es el fin de una fase de la historia de la ocupación y el comienzo de una nueva fase de debilidad”, agregó el portavoz.

Nacido en Polonia en 1923, Peres emigró a Palestina, entonces bajo mandato británico, cuando tenía 11 años. A su llegada se sumó al movimiento sionista y conoció a David Ben Gurion, el fundador de Israel, quien se convertiría en su mentor y en el primer primer ministro de Israel. Peres fue nombrado director general del naciente Ministerio de Defensa israelí a los 29 años. De esta primera etapa en la década de 1950, Peres es reconocido por establecer una crucial alianza con Francia, que concedió a Israel su histórica supremacía aérea regional y su nunca declarado programa nuclear militar. Se considera que Israel es el único país de Medio Oriente con bombas atómicas, aunque su gobierno nunca lo admitió públicamente.

Después de dejar la política, el ex presidente se había mantenido activo con su Centro Peres Para la Paz, que promueve la coexistencia entre judíos y árabes, en un momento de pesimismo sobre la perspectiva de solucionar el conflicto israelí-palestino.